¿Sabías que en la actualidad el 50% de la población vive en ciudades, y está previsto que esta cifra aumentará un 70% en 2050? Estos datos los declara ONU Hábitat —Programa de Naciones Unidas para los Asentamientos—, y hace un llamado para construir nuevas herramientas y planteamientos que ayuden a tener resiliencia en las comunidades, y no solo en México sino en todos los países.
¿Qué es la resiliencia?
Desde hace varios años el concepto de resiliencia se ha utilizado para describir la habilidad de cualquier sistema urbano de mantener continuidad después de impactos o de catástrofes mientras contribuye positivamente a la adaptación y la transformación.
De esta forma, las comunidades estarán mejor preparadas para:
- Proteger y mejorar la vida de sus habitantes.
- Asegurar avances en el desarrollo comunitario.
- Fomentar un entorno en el cual se pueda invertir,
- Promover el cambio positivo.
Una comunidad resiliente es aquella que evalúa, planea y actúa para preparar y responder a todo tipo de obstáculos, ya sean repentinos o lentos de origen, esperados o inesperados.
Construir resiliencia en las comunidades y cuidar al medio ambiente
Si no se hicieran inversiones significativas para hacer que las ciudades sean más resilientes, de aquí a 2030, los desastres naturales podrían costar a las ciudades en todo el mundo cerca de $314 mil millones anualmente.
Para comenzar a reducir la vulnerabilidad y construir resiliencia en las comunidades, se debe prestar especial atención al cuidado del medio ambiente, ya que el cambio climático podría llevar a 77 millones más de residentes urbanos hacia la pobreza.
Además, este fenómeno también está incrementando los riesgos que afrontan las ciudades, está provocando una subida de los niveles del mar que amenaza a 200 millones de personas que viven en la costa. En definitiva, las ciudades y los gobiernos locales deben incrementar su capacidad de reducir los daños y los periodos de recuperación de cualquier desastre potencial.
Es necesario aplicar estrategias y políticas para atender cada uno de estos problemas, como parte de una visión más general para hacer que las ciudades de todo tamaño y perfil sean más resilientes y habitables.
Para lograrlo, los gobiernos locales, ciudadanos, e incluso el sector empresarial, deben incrementar su capacidad de afrontar nuevos desafíos protegiendo a todas las personas, y por supuesto al medio ambiente.
Construir resiliencia en las comunidades: trabajo global de CEMEX
Para CEMEX, mitigar la crisis climática y medioambiental es prioridad, la compañía dedicada a la construcción busca desde sus acciones y estrategia impulsar la innovación y desarrollo de nuevos productos y soluciones urbanas que contribuyan de forma positiva a los efectos climáticos y medioambientales.
A lo largo de los años, CEMEX ha logrado construir resiliencia en las comunidades en México y el mundo, y creado un impacto social para hacer frente a los desafíos de hoy y los que se aproximan en un futuro. Como parte de este compromiso, la compañía ha consolidado distintas iniciativas con las que planea:
- Adoptar medidas urgentes para combatir el cambio climático y sus efectos.
- Gestionar sosteniblemente los bosques, luchar contra la desertificación, detener e invertir la degradación de las tierras, detener la pérdida de biodiversidad.
- Crear resiliencia en las comunidades y ecosistemas.
Las iniciativas tienen puntos específicos con los que ha trabajado la empresa, las cuales son dignas de reconocer en este Día Mundial del Medio Ambiente. ¡Conocelas a continuación!
Economía circular en el concreto
El concreto tiene dos características destacadas que son especialmente importantes para el desarrollo de una economía circular: es 100% reciclable como agregado alterno o como materia prima para la producción de cemento y, al igual que los árboles, absorbe CO2 a lo largo de su ciclo de vida (recarbonatación) por hasta el 25% de las emisiones de CO2 del proceso. Por ello, CEMEX aprovecha la carbonatación rápida de los agregados de concreto.
La iniciativa CEMEX Ventures anunció su inversión en Arqlite SPC,, una empresa que se enfoca a la producción de gravas artificiales a partir de residuos plásticos no reciclables para darle segunda vida al plástico en el concreto.
En 2020, CEMEX recuperó 94% del total de los residuos generados y los reutilizó dentro de sus operaciones, y solo el 6% se destinó a relleno sanitario.
Innovación en productos
Otras de las acciones de CEMEX para construir resiliencia en las comunidades es el desarrollo de más tecnologías del concreto, aditivos y materiales aglutinantes novedosos que permitan reducir la huella de CO2 del cemento convencional, es por ello que la compañía firmó un acuerdo con Carbon Upcycling Technologies, con el propósito de producir nanomateriales con mayor reactividad y menor huella de carbono.
Reforestación y acciones en sumideros de carbono
Los sumideros de carbono son depósitos naturales o artificiales que absorben el carbono de la atmósfera y contribuyen a reducir la cantidad de CO2 del aire. Para CEMEX, estos lugares juegan un rol muy importante en la reducción de la concentración total de CO2 en la atmósfera, y sus esfuerzos se centran en la rehabilitación de canteras y conservación de la biodiversidad.
A lo largo de los últimos 20 años, CEMEX ha conservado la naturaleza y compartido sus maravillas a través de El Carmen, una reserva privada de biodiversidad en la frontera entre México y Estados Unidos que se extiende a lo largo de cinco ecosistemas diferentes y alberga a miles de especies de plantas, aves, mamíferos, reptiles y anfibios.
Este lugar también almacena cerca de 11 millones de toneladas de CO2 capturadas biológicamente, el equivalente a las emisiones anuales de las operaciones de cemento en México.
Concreto con cero emisiones netas de CO2
Una de las metas al 2050 de CEMEX es ofrecer un concreto con cero emisiones netas de CO2 para todos los clientes y lugares del mundo. El concreto seguirá desempeñando un rol fundamental en la economía de bajo carbono ya que no existen sustitutos para los atributos clave que ofrece: resistencia y resiliencia eficientes en cuanto al costo.
Energía limpia en las operaciones
La estrategia global de energía de CEMEX incluye el desarrollo de proyectos de energía limpia dentro de sus operaciones y la propagación de prácticas de abastecimiento que permitan la adopción de dichas fuentes de generación de energía.
Actualmente la empresa es líder en la industria en el uso de electricidad limpia y ha fijado la ambiciosa meta de obtener el 40% de nuestro consumo de energía previsto en sus operaciones de cemento de fuentes limpias.
En 2020, la empresa anunció su meta 2030 de reducir en un 35% las emisiones netas específicas de CO2. También el compromiso para 2030 de reducir en un 55% las emisiones netas específicas de CO2 de sus operaciones en Europa.
Aunado a ello, tiene la ambición de producir globalmente un concreto con cero emisiones netas de CO2 para el 2050. Además, busca producir cemento con 40% de electricidad de fuentes limpias para el 2030, cifras que están detalladas en su Reporte Integrado 2020.
Otras acciones que construyen comunidades más resilientes y a su vez procuran al medio ambiente
- Promoción de infraestructura sostenible y resiliente
CEMEX aprovecha la experiencia que tiene en la industria de materiales de construcción, ya que cuenta con una manera efectiva de crear una infraestructura sostenible para sus productos y servicios, y contribuye a desarrollar comunidades y ciudades resilientes, accesibles e inclusivas, incluyendo estrategias de movilidad.
Sumado a esto, la Plataforma Crecimientos aborda los principales retos inherentes a la pobreza y la desigualdad en comunidades vulnerables, como:
- Vivienda inadecuada.
- baja tenencia de la tierra.
- Falta de acceso a servicios básicos.
- Desempleo.
- Inclusión financiera.
2. Innovación y emprendimiento social y ambiental
A través de esta iniciativa, la empresa ofrece soluciones sostenibles a los retos sociales y ambientales por medio de apoyo, promoción o contribución a organizaciones que generan ideas disruptivas y brindan su atención a emprendimientos locales que impulsan las economías locales.
Durante 2020, CEMEX intercambió mejores prácticas y cooperó con ONGs para trabajar en emergencias relacionadas con la pandemia, y ayudó a cerca de 200 MiPyMEs a sortear la crisis sanitaria.
Además, por medio de la red ARISE, diseñó una serie de webinars para entidades privadas y públicas, enfocados en riesgos digitales, preparación para desastres naturales y en cómo interactuar de manera segura durante la pandemia.
3. Cultura de protección ambiental, salud y seguridad
La compañía ha logrado fomentar una cultura de salud y seguridad en comunidades y ciudades, asociándose con gobiernos y localidades para desarrollar proyectos productivos y educativos que contribuyan a:
- La regeneración de los ecosistemas.
- Restauración de la biodiversidad.
- Promoción del uso sostenible de los recursos.
- Fomento de una cultura de cuidado y protección del ambiente.
Es importante mencionar que CEMEX, desde su estrategia de negocio, continúa cumpliendo su propósito: la creación de resiliencia ante la crisis climática y medioambiental mediante los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la Agenda 2030, siendo su prioridad la construcción de un mejor futuro.
