De acuerdo con Fast Company, en 2012 el Laboratorio de Movilidad del MIT se asoció con la empresa de diseño Continuum para desarrollar una silla de ruedas conceptual que pudiera desplazarse por todos los terrenos: arena, barro, baches, lo que la hace un invento con diseño inclusivo .
Con unas sencillas palancas que el usuario empuja para catapultarse hacia delante, el diseño ganó uno de los premios inaugurales Innovation by Design de Fast Company, y hoy, el concepto ha evolucionado hasta convertirse en una silla comercial que los usuarios alaban como la «bicicleta de montaña de las sillas de ruedas».
Fue el primer ejemplo de diseño accesible del concurso, la idea de que el diseño no puede limitarse a servir a un mítico usuario medio, sino que debe tener en cuenta las necesidades de comunidades tradicionalmente olvidadas.
Diseño inclusivo, ¿la nueva tendencia?
En 2017, Nike ganó los máximos honores de Innovation by Design por el Pro Hijab, un cubrecabeza que absorbe la humedad, concebido para facilitar y hacer más cómodo el deporte a las mujeres musulmanas.
El Pro Hijab no era solo un experimento de diseño puntual. Era un negocio inteligente. Hoy en día, la moda modesta es un negocio de 277,000 millones de dólares, y se espera que crezca hasta los 311,000 millones en 2024.
Este es un argumento fundamental para el diseño accesible, y su compañero el diseño inclusivo, que postula que los diseñadores deben asociarse con los usuarios excluidos para desarrollar mejores productos y servicios para todos.
Cuanta más gente llegue, mejor será el resultado final. No es de extrañar que grandes empresas, desde Google y Microsoft hasta Unilever, hayan adoptado esta idea.
Pero a veces puede funcionar demasiado bien. Este año, Nike ha ganado un premio a la innovación en el diseño por su zapatilla Go Flyease, la primera zapatilla que se puede poner sin agacharse ni usar las manos.
Destinadas a las personas que tienen problemas para atarse los cordones —como alguien con Parkinson o artritis—, las zapatillas han sido muy populares entre los aficionados a las zapatillas y se agotaron en su lanzamiento, lo que provocó las críticas de las personas con discapacidad que no pudieron hacerse con un par.
Tommy Hilfiger ha creado una gama de ropa inclusiva bajo la marca Tommy Adaptive por ejemplo Jeans que se adaptan a la prótesis, las aberturas anchas en las piernas y los elementos ajustables de los pantalones se adaptan a las piernas ortopédicas, las prótesis y los yesos.
Ropa para personas en silla de ruedas, los tops tienen aberturas traseras ampliadas. Las partes inferiores ofrecen frentes bajos para reducir el amontonamiento y espaldas más altas para la modestia, sin bolsillos ni costuras incómodas, así como doble tapeta frontal para facilitar el acceso.
Las cremalleras de una mano en las chaquetas, los botones magnéticos en las camisas y los cierres de gancho y bucle en los tops, pantalones y faldas facilitan la tarea de vestirse. Cada temporada Tommy se esfuerza más por mejorar la línea Tommy Adaptive para adaptarla a la vida de las personas que la llevan.
El equipo está innovando constantemente, gracias a sus talleres de investigación y a los innumerables correos electrónicos que les dicen qué funciona, qué no y qué más debería hacer Tommy Adaptive para ayudar a hacer posible la independencia.
La lección para todo aquel que quiera introducirse en el diseño inclusivo: Diseña para casos extremos, pero prepárate para un ataque generalizado.