La seguridad en el trabajo es un aspecto vital para el buen desarrollo de cualquier actividad. Hace unos días fuimos testigos de un espantoso accidente por ausencia de medidas pertinentes dentro de un set de grabación. Halyna Hutchins, directora de fotografía falleció y un director resultó herido luego de que el actor y productor Alec Baldwin disparara una pistola que debía llevar balas de fogueo, mientras rodaba en Nuevo México.
Tal como detalla The Conversation, cuando se rueda una película con armas, hay que tomar muchas decisiones: cada elemento de utilería debe ser apropiado para el personaje y para la escena. En la mayoría de las películas norteamericanas se utilizan armas reales para añadir realismo; sin embargo estas son cargadas con balas de fogueo por seguridad.
En el escenario donde se filma o graba un programa de televisión siempre hay un armero, un responsable de seguridad y un coordinador de acrobacias: al menos tres personas que siempre deben tener un ojo puesto en las armas, para prevenir cualquier tipo de accidente.
Hace poco terminó el rodaje de Darklands, un thriller psicológico protagonizado por Nadine Garner sobre una policía que no consigue detener un tiroteo y es perseguida por una periodista decidida a utilizar la historia de la policía para resucitar su propia carrera de escritora.
Utilizaron armas reales en una sola de las escenas. La noche que dispararon las balas de fogueo fue una situación muy controlada, trabajando con un equipo muy experimentado. La seguridad del reparto y del equipo era de suma importancia para todos.
Rodar con balas de fogueo
El accidente que causó el fallecimiento de Halyna Hutchins no es el primero ocurrido con armas de fuego dentro de un set de grabación. En 1993, el modelo y actor Brandon Lee falleció luego de recibir en el pecho un impacto de bala, en lugar de un cartucho de fogueo.
Otras dos grandes historias en la década de 1980 cambiaron la forma de enfocar la salud y la seguridad en el trabajo en el set.
En 1982, tres actores, dos de ellos niños, murieron en el escenario de Twilight Zone, cuando las explosiones de los efectos especiales hicieron que se estrellara un helicóptero. Sus muertes resonarán para siempre en el mundo del cine.
En 1984, el actor Jon-Erik Hexums se puso una pistola llena de balas de fogueo en la cabeza y, bromeando sobre los retrasos en el rodaje, apretó el gatillo. La fuerza de la guata fue suficiente para herirle mortalmente.
Seguridad en el trabajo
Para todos los elementos del rodaje de una película, hay que sentarse y preocuparse por todos los escenarios posibles y tener un plan para cualquier riesgo, y el responsable de seguridad trabajará codo con codo con el director y el primer ayudante de dirección para garantizar la seguridad.
Al buscar las localizaciones, el responsable de seguridad deberá tener en cuenta elementos como los peligros de tropiezo, la seguridad vial, iluminación y suministro de electricidad.
Si el rodaje se realiza en un terreno público, como un parque, el ayuntamiento pedirá una evaluación de riesgos: en ella se detallará dónde se aparcará, dónde estarán los baños y dónde estará el equipo, además de considerar posibles problemas como qué pasaría si se cayera una rama de un árbol.
Incluso un actor que lleve una taza de café caliente en la pantalla será considerado por su seguridad. En el rodaje de este año, también se ha añadido una enfermera y un oficial de COVID-19 para tener en cuenta la salud de todos los presentes.
Cuando se monta una escena, el oficial de seguridad lo comprueba todo, desde las alfombras de seguridad del suelo hasta el relleno de gel que oculta el vestuario.
En los rodajes, las armas son suministradas por un armero. Tendrán acceso tanto a armas reales como a réplicas, y el alquiler de armas reales cuesta más que el de las réplicas.
Siempre que se utilicen armas hay que tratarlas con el máximo respeto. La seguridad tiene que ser primordial. En Australia, las armas se manejan tan poco que eso hace que sean muy respetadas: la gente es muy consciente del arma.
Todos los protocolos que rodean el uso de las armas están bien establecidos. Todo lo que se hace en torno a un arma debe tratarse con mucha precaución.
El arma de fogueo nunca se dispara contra nadie, y todo el reparto y el equipo son informados en múltiples ocasiones sobre la seguridad. Siempre se avisa a la policía, así como a los vecinos adyacentes al lugar de rodaje.
Una tragedia
Durante el rodaje del largometraje se decidió trabajar con armas reales, pero sólo utilizaron balas de fogueo en una escena. En todas las demás escenas se utilizan efectos visuales (VFX).
Las armas de fogueo se eligieron por la importancia del arma para la narración en esa escena. Se necesitaba que los reflejos en la cara del actor fueran reales, que su respuesta física fuera real. Como cuando Alan Rickman se dejó caer durante el rodaje de La Jungla de Cristal: a veces el momento sólo exige esa verdad palpable.
Pero muchos efectos de pistola pueden hacerse bien mediante VFX, y las empresas incluso venden paquetes de disparos VFX. Añadir estos efectos es un campo muy especializado: se pueden añadir diferentes bengalas, diferentes patrones de humo, e incluso se puede hacer que un arma retroceda en la mano de alguien.
Se trata de un problema de seguridad laboral. Cuando las cosas van fatalmente mal en cualquier lugar de trabajo, es una tragedia.
En Australia, siempre se ha considerado que el cine es un entorno muy bien regulado. En el escenario todos entienden que hacer una película no vale la pena poner en riesgo la vida o la salud de alguien.
La situación de Alec Baldwin es simplemente una desgracia para todos los implicados, incluidos los familiares de Hutchins y el propio actor.
Foto de portada: «Alec Baldwin» by Gage Skidmore is licensed under CC BY-SA 2.0