En la lucha contra el cambio climático, el papel que juega el sector público es de gran relevancia, ya que es el responsable de crear políticas y legislaciones que dictaminen las regulaciones, que deben cumplir tanto los ciudadanos como las empresas para contribuir a disminuir el impacto ambiental.
En este año, el Senado de la República aprobó dos leyes ambientales, la Ley de Residuos Sólidos Urbanos, que se refiere a los plásticos, y la Ley General de Economía Circular.
Leyes a favor del medio ambiente
Para conocer los aspectos generales de estas dos leyes, integraRSE —consultoría de responsabilidad social y empresarial— con el apoyo del Centro Mexicano para la Filantropía A.C. (cemefi) llevaron a cabo el pasado 13 de diciembre, el foro Nuevas Leyes Ambientales: desafíos para la RSE.
El foro contó con la participación de Jatziri Pando, abogada especialista en derecho ambiental y secretaria técnica de la Comisión del Medio Ambiente del Senado de la República.
La abogada, explicó que estas dos leyes en realidad no son nuevas, sino que son una evolución de otras que ya existían; y declaró que su proceso legislativo todavía no ha acabado, ya que después del proceso de aprobación que se dio en el Senado de la República, pasaron a la Cámara de Diputados donde se volverán a analizar y se decidirá si se mantienen con los mismos términos, si se le hacen modificaciones o son rechazadas.
Ley de residuos plásticos
En cuanto a la Ley de Residuos Sólidos Urbanos, la cual se enfoca en los desechos plásticos, mencionó que, a raíz del cambio de administración, en el Senado se presentaron un total de 26 iniciativas de todos los partidos políticos, las cuales proponían reformas a la Ley General para la Prevención y Gestión Integral de los Residuos en México, que ya estaba vigente.
Por lo que el Senado realizó un Ejercicio de Parlamento Abierto, en el que se llevaron a cabo talleres, foros y reuniones con expertos en la materia y representantes de otras entidades federativas.
Sobre todo porque el tema de plásticos es un tema muy controvertido, por lo que se buscó llegar a un acuerdo; porque es un tema que polariza ciertos sectores. Hace tres años la industria no quería saber nada de prohibición y por otro lado estaba la sociedad civil que solicitaba una prohibición total.
Si bien es cierto que anteriormente hubo ciertas prohibiciones en cuanto al uso y manejo de residuos plásticos, cada entidad federativa gestionó y reguló estos desechos como mejor le pareció, por lo que hubo un gran problema en la implementación de las leyes, ya que eran diferentes en cada estado de la república.
En ese sentido, una de las acciones que tomó el Senado es proponer un estándar general que deberán cubrir todos los estados sin invadir su facultad de entidad federativa. Asimismo, la abogada señaló que con las nuevas reformas se pretendía exigir más a la industria para que acelerara su proceso de transición hacia un modelo económico más sostenible, pero a causa de la pandemia, no pudo ser posible.
Ley de economía circular
Respecto a la Ley General de Economía Circular, la secretaria explicó que esta es la primera iniciativa para expedir una ley referente a este modelo económico, y que en un inicio causó mucha controversia porque gran parte del contenido que se proponía ya estaba regulado, por lo que se iba a sobrerregular, además de que se contradecía en muchos aspectos.
Se realizó un Ejercicio de Parlamento Abierto para afinar los detalles y conseguir que esta reforma fuera coherente con la Ley de Residuos Sólidos Urbanos. La abogada, afirmó que esta reforma quedó corta, ya que solo establece un marco muy general de lo que se entiende por economía circular.
El mayor avance de esta reforma es que se propone una legislación en cuanto a los residuos electrónicos, los cuales, en el país no se les da un correcto manejo. Generalmente terminan en las calles o en tiraderos a cielo abierto, y las personas que buscan obtener un beneficio de ellos utilizan procedimiento dañinos para la salud y el medio ambiente.
Uno de los principales problemas, independientemente de lo que digan las leyes, es que en los últimos años ha habido un recorte de presupuesto muy importante en todas las instituciones del gobierno federal, sobre todo en la SEMARNAT, lo que dificulta que se implementen de manera correcta estas reformas.
Estos cambios en las leyes, sin duda son un gran avance en materia de cuidado ambiental, pero no son la solución ante el problema climático. Independientemente de que existan este tipo de leyes, es importante que todos los sectores tomemos conciencia del impacto que generan nuestras actividades, así como de los productos y servicios que adquirimos, para que, en medida de lo posible, realicemos cambios de nuestros hábitos a unos más sostenibles.
José Alberto Sánchez Nava.