Con la reactivación de la actividad económica que se está viviendo tras los estragos provocados por la pandemia, muchas personas en edad laborable están considerando darle un giro a sus profesiones, acarreando una crisis para las vacantes a nivel global, ante ello, la Gran Renuncia en el mundo —incluyendo a nuestro país— podría ser una realidad que transforme la empleabilidad.
De acuerdo con el INEGI, en 2021 México contaba con 16.3 millones de mujeres y hombres entre 20 y 29 años de edad, de los cuales 11.3 millones tenían un trabajo. En tanto, como lo reporta la Organización Mundial del Trabajo (OIT), la tasa promedio de desocupación de los jóvenes entre 15 y 24 habría llegado a 23,8% el primer trimestre de 2021.
Estas cifras demuestran que dos las generaciones más jóvenes activas laboralmente se encuentran en un momento crucial, en el cual la crisis en el sector productivo, sumada a las malas condiciones laborales, están provocando que muchos colaboradores renuncien, o simplemente cambien su fuente de sustento.
¿Que es la Gran Renuncia?
El año pasado comenzó a circular el término «Gran Renuncia» para denominar al abandono voluntario masivo de puestos en Estados Unidos. De acuerdo con Anthony Klotz, académico de la Escuela de Negocios Mays de la Texas A&M University, quien acuñó dicho concepto, existen cuatro factores que han incentivado este fenómeno:
- Renuncias: Desde antes del inicio de la contingencia ya había una alza en las renuncias, sin embargo, muchos se abstuvieron por la incertidumbre. «Estas personas se quedaron en su empleo, aunque querían dejarlo, por ello cuando la estabilidad regresó tomaron la decisión.
- El síndrome del burnout: Este fue otro factor que instó a los colaboradores a dejar sus puestos, ya que muchos quedaron exhaustos de las transformaciones abruptas y las condiciones laborales.
- Falta de estímulo: Muchas y muchos trabajadores optaron por abandonar sus labores por falta de un ascenso o la pérdida de equipos de trabajo.
- Despedirse del home office: La última causa es el regreso a la antigua «normalidad» ya que muchas personas se han acoplado al modo híbrido.
Además de estos motivos, al menos en economías fuertes, los apoyos de desempleo y la seguridad social han influido porque permiten tomar este riesgo, sin poner en peligro total los ingresos, situación que no es así en otros lugares.
Así experimentan los millennials y la Gen Z el trabajo
Sin duda, los millennials han sido una de las generaciones más populares en los últimos años, este grupo está conformado por quienes nacieron entre 1981 y 1993, aunque algunos expertos suelen considerarla hasta 1995, ya que comparten ciertos rasgos —independientemente de su país de origen— ya que ellos experimentaron la transición y crecimiento del Internet.
Son una generación online que se desarrolló en un mundo con grandes avances tecnológicos y muy rápidos. Aunado a ello, fue expuesta al acceso de información masiva e instantánea, así como al dominio de las redes sociales. Sin embargo, poseen «valores sociales elevados y están dispuestos a luchar por diversas causas en pro de una vida más saludable como el medio ambiente».
Dado su gusto por las soluciones inmediatas y digitales y la determinación en sus ideales, suele creerse que tienden a ser volátiles en cuanto a sus empleos, pero de acuerdo con la empresa de contratación Robert Walters Group, las y los millennials como colaboradores tienen características esperanzadoras:
- Son entusiastas al trabajar con compañías que utilicen la tecnología avanzada e innovadora.
- Están dispuestos a la movilidad internacional, valoran el hecho de tener una guía y les importa su desarrollo profesional.
- Son sociables, para estos jóvenes el ambiente de trabajo es crucial ya que esperan una cultura laboral abierta e integradora.
Por su parte, la Gen Z, que todavía no se encuentra tan definida, implica a las personas nacidas entre 1994 y 2000, y son confundidos con los millennials debido a su estrecha relación.
Las personas de la Gen Z están muy involucradas con la tecnología, son emprendedoras, se identifican con las comunidades virtuales y tienen un fuerte sentido de compromiso con el futuro, además de un desarraigo por la formación educativa formal como clave del éxito profesional.
En el ámbito laboral se identifican por:
- Apreciar los valores empresariales tradicionales, por lo que preferirán trabajar en empresas grandes, a las que llegarán en su mayoría con conocimientos prácticos, adquiridos en prácticas profesionales.
- Administrar su tiempo de manera diferente y están dispuestos a trasladarse a otros lugares para trabajar, pero esperan la misma flexibilidad por parte de sus empleadores.
- Pese a su habilidad con la tecnología tienen aprecio por la comunicación humana directa.
- Buscar un empleo que los desafíe y signifique más que remuneración económica, una aportación al entorno.
Dichas generaciones ahora provocarán la Gran Renuncia.
Los millennials y Gen Z van por la Gran Renuncia
Estas dos generaciones han vivido algo que muchas no: una pandemia y un confinamiento estricto, por lo que sus aspiraciones y características se modificaron en un tiempo muy corto. Según lo ha constatado el Índice de Tendencias Laborales elaborado por Microsoft:
El 52% de los millennials y de la Gen Z están considerando cambiar de empleo en los próximos meses.
El estudio incluye a habitantes de España, Argentina, Colombia, Brasil, Estados Unidos, China, India, Japón, Reino Unido, Alemania, Italia y Francia, por lo que podría hablarse de una tendencia generalizada. Lo cierto es que la Gran Renuncia en México, aunque es posible, sigue limitada pues «existen factores estructurales que aumentan el riesgo laboral y dificultan un escenario similar al estadounidense».
Pero, es posible que el ímpetu y las aspiraciones de los millennials y la Gen Z en nuestro país pueda traer esta situación al sector laboral, por ello, los empleadores tendrán que poner mucha atención para evitar perder talento.
Retener al personal para no tener una Gran Renuncia en México
Según datos de El Financiero, una empresa gasta 30% de su presupuesto de capacitación en retener a sus colaboradores, asimismo, un nuevo empleado tiene en promedio un costo de contratación de hasta 2 mil 14 dólares, por ello es necesario que las compañías consideren cuidar a su personal y así evitar la Gran Renuncia en México y en el resto de los países.
Algunas de las ventajas que tiene la retención del personal, además de aminorar gastos, son:
- Optimizar la productividad.
- Minimizar la rotación.
- Mejorar el ambiente de trabajo.
- Incrementar la satisfacción de los trabajadores.
Asimismo, el procurar a los colaboradores es una parte fundamental dentro de las estrategias RSE de cualquier organización, por ello, es importante considerar los siguientes puntos que serán indispensables si la Gran Renuncia en México y otros lugares se hace factible:
- Salarios bien remunerados, con una relación justa entre la carga de trabajo y la remuneración recibida.
- Buen ambiente laboral, una demanda importante para los millennials y la Gen Z.
- Oportunidades de crecimiento profesional, que ofrezcan un ascenso y una carrera dentro de la corporación.
- Equilibrio laboral y personal, que será transcendental ya que con la pandemia muchas personas han replanteado sus prioridades.
- Implementar opciones innovadoras, en otras palabras privilegiar las modalidades de trabajo virtuales y las capacitaciones constantes.
Mejorar las condiciones del trabajo en todo el mundo para evitar la gran renuncia en México y en el resto de países, es una tarea que tanto el sector privado como el público deben tomar como priorigdad, ya que la fuerza laboral es un factor que impulsa a las economías y que sin duda es un ganar-ganar para todos.