Las leyes de transparencia en informes de ESG, que monitorean el desempeño ambiental, social y de gobierno de las empresas, están por llegar. De acuerdo con TriplePundit, la Comisión de Valores de Estados Unidos (SEC, por sus siglas en inglés) está trabajando en una nueva norma que exigirá a las compañías proporcionar datos exactos sobre cómo el cambio climático podría afectar un negocio.
Por su parte, Europa ha anunciado nuevos requisitos sobre cómo los bancos deben informar los riesgos medioambientales y los objetivos de carbono. Estas iniciativas son solo la punta del iceberg pues los reguladores de todo el mundo están creando activamente una nueva legislación para aumentar la claridad en aspectos de ESG.
Será indispensable la transparencia en informes de ESG
Aunque se necesitará tiempo para perfeccionar las regulaciones, además de que todavía no existe un criterio de medición universal para evaluar los resultados, no significa que haya que esperar para mejorar la transparencia en informes de ESG, ya que esto va más allá de las autoridades.
Por ejemplo, el 74% de los consumidores aseguran que eligen, cambian o evitan las marcas en función de su postura sobre cuestiones sociales, por otra parte, el 85% de los inversores tienen en cuenta los factores ESG en sus decisiones.
Por ello, las compañías necesitarán afinar su estrategia de divulgación lo antes posible ya que es el momento de controlar sus datos, antes de que una avalancha de imposiciones las haga trabajar bajo presión.
4 pasos para un mejor reporte de sostenibilidad
Con estos cuatro pasos, las empresas lograrán que la transparencia informes ESG no sea un problema a corto plazo:
1. Entender por qué se informa sobre ESG
Hay una variedad de razones para mostrar las iniciativas ESG, muchas corporaciones consideran que estos aspectos son fundamentales para sus valores, mientras que otras buscan satisfacer a los inversores y accionistas, o lo hacen para mitigar el riesgo. Sea cuál sea el motivo, el primer paso es comprender el por qué de las divulgaciones, ya que esto dará forma a la estrategia.
2. Elegir la información a divulgar
Para ello, hay que centrarse en las métricas más significativas para los stakeholders prioritarios —ya sean empleados, clientes, el consejo de administración, inversores o reguladores—, estas deberán alinearse con los valores y la estrategia empresarial.
Si la compañía está comprometida con el cuidado ambiental, por ejemplo, tendrá que hablar sobre la eficiencia energética, la contaminación del aire y del agua, y las emisiones de gases de efecto invernadero.
Además, se deberá mirar cómo lo hacen otras corporaciones del sector para facilitar la comparación de los resultados, otro punto es medir el rendimiento ESG en toda la cadena de suministro, sin embargo, independientemente de las métricas, se requerirá que las afirmaciones puedan resistir el escrutinio, pues las partes interesadas y los auditores comprobarán con más frecuencia los hechos de las declaraciones públicas.
3. Decidir los marcos de información
Las organizaciones sin ánimo de lucro, los grupos empresariales y otras asociaciones han creado docenas de marcos de información para orientar a las empresas sobre qué métricas ESG deben medir y cómo hacerlo.
Cabe señalar que existen tres marcos populares, estos son la Iniciativa Mundial de Información, la Fundación para la Información sobre el Valor y el Grupo de Trabajo para la Divulgación de Información Financiera Relacionada con el Clima.
Cada grupo tiene su propia agenda, lo que significa que algunos instrumentos se centran en las cifras medioambientales, mientras que otros en las cuestiones sociales. Dado que ningún marco cubre todos los aspectos de ESG, muchas compañías deciden ocuparlos para crear uno propio.
4. Aprovechar la tecnología
La elaboración de informes ESG es una tarea compleja que no puede gestionarse eficazmente mediante hojas de cálculo. Recopilar manualmente datos —sobre la huella de carbono y el uso del agua, la diversidad y la inclusión, las prácticas laborales éticas, etc.— que pueden residir en muchos lugares de la organización y de la cadena de suministro es casi imposible.
Un software integrado simplifica este proceso, al reunir los datos fundamentales en tiempo real, lo anterior hace que sea rápido y sin problemas el construir reportes, tomar decisiones y comunicar esfuerzos ESG de una manera creíble y coherente.
Por último, para que estos informes sean eficaces, hay que duplicar la información en 2022, ante esto las corporaciones no deberían esperar a que la normativa se imponga para construir un proceso sólido, por lo que hablar voluntariamente sobre ESG es oportunidad de contar su propia historia e impulsar proactivamente un cambio positivo.