Han pasado 14 años desde que inició una de las franquicias más exitosas conocidas: El Marvel Cinematic Universe (MCU). Este proyecto de entretenimiento ha generado grandes ganancias y un sin fin de fanáticas y fanáticos en el mundo, que año con año consumen las historias que se han ido desprendiendo de los cómics y que han expuesto tramas que se han convertido en sagas de culto.
La ficción se ha adaptado de alguna manera a las expectativas de un público que cada vez más exige una representación más diversa, por ello, aunque a algunas personas no les guste la inclusión en Marvel, la marca seguirá apostando por personajes más reales, como ya lo había prometido su CEO, Kevin Feige.
Lo anterior se refuerza con el anuncio de Shea Couleé, una reconocida drag queen, como parte del elenco de la serie de MCU Ironheart, la cual se estrenará en 2023 y tiene como base la historia de Riri Williams (que será interpretada por la actriz Dominique Thorne), una ingeniería que podría considerarse la sucesora de Ironman, uno de los personajes más populares de Marvel.
La inclusión aumentó en Marvel
Sin duda, una de las mayores apuestas de Marvel fue la producción de Iron Man (2008), que representó la primera por cuenta propia y el inicio del MCU. Los riesgos eran grandes, primero porque el personaje no era uno de los más conocidos y segundo por la elección del protagonista, Robert Downey Jr, sin embargo, este último resultó una de las elecciones más afortunadas ya que la crítica y los fanáticos lo consideraron perfecto para el papel.
Downey Jr mostraba la irreverencia del héroe con un parecido físico intermedio, que logró capturar mucho interés por la película, y ser la ancla de una saga multimillonaria. Con el paso de los años, Marvel, que fue adquirida por Disney en 2009, comenzó a incurrir en la modificación de sus personajes, que fueron poco a poco incluyendo orígenes multiculturales y orientaciones sexuales diversas.
Este último punto ha destacado de una manera singular, debido a que en general la marca nos habla poco de la vida romántica de sus personajes, incluso, hasta el lanzamiento de WandaVision (2021), las escenas entre parejas parecían simples cameos. Pero es en la preferencia sexual que Marvel ha contradecido a quienes no les gusta la inclusión, pues está apostando fuertemente por ella.
Desde la declaración de Loki como bisexual hasta la reciente incorporación de Shea Couleé, una artista del ambiente drag, Marvel ha dejado claro que su universo se está expandiendo e integrando la representación de sectores excluidos, apostando por la visibilización y la inclusión. Así lo señaló la vicepresidenta de la compañía, Victoria Alonso, en 2021:
«Hay muchas cosas que tenemos por delante, que creo que serán representativas del mundo de hoy. No daremos en el clavo en la primera película o la segunda, pero haremos todo lo posible para tratar de representarlo consistentemente».
Victoria Alonso, vicepresidenta de Marvel.
No les gusta la inclusión… forzada
Aunque los intentos más claros de Marvel por ser incluyente son claros con la apuesta por las heroínas de su catálogo —como Capitana Marvel—, lo cierto es que han sido criticados por algunos seguidores al sentir que algunos han sido forzados, como es la escena en Avengers End Game (2019), en las que los personajes femeninos se unen en una sola secuencia.
Incluso, Thrin Tran, productora ejecutiva de Marvel, declaró que «en realidad siempre hubo preocupación respecto a cómo la audiencia percibiría dicha escena, y si realmente aportaba algo a la narrativa», pero fue esta, el primer paso hacia toda la profundidad que tendrían tanto las heroínas como las representaciones diversas dentro de Marvel.
Y aunque algunas opiniones aseguren que no les gusta la inclusión del MCU, puesto que parece una estrategia publicitaria más que desvirtúa el contenido de las historias o, como lo ha comentando la actriz Jessica Alaba, quien llegó a encarnar a Sue Storm en Los cuatro fantásticos (2005), que resulta insuficiente y más de lo mismo.
Lo cierto es que la multifranquicia no se detendrá en sumar más diversidad racial y sexual en sus producciones, de hecho es la inclusión una parte central de la llamada Fase 4 del MCU, en la que ya encontramos una mayor presencia de mujeres, integrantes de la comunidad LGBTIQ+ y caracteres de distintas culturas, como lo presentando por Eternals (2021).
Si bien, el material no resultó un éxito en taquilla, sí lo fue en cuanto inclusión, ya que contó con la directora china Chloé Zhao, Phastos, el primer superhéroe abiertamente homosexual y con Lauren Ridloff, como la primera actriz y personaje con discapacidad auditiva.
¿Sirve de algo la representación?
De acuerdo con un artículo de Vogue, la conformación de elencos más diversos e incluyentes, obedece a la deuda sistémica que el mundo del cine tiene con las comunidades que «tradicionalmente» no han sido contempladas o se les ha estereotipado.
«Hace años que se lucha por darle la vuelta a la situación y permitir que aquellos actores y actrices que pertenecen a alguna minoría puedan acceder tanto a papeles que correspondan con su propia identidad como a papeles que no tengan por qué hacerlo».
Vogue.
Siguiendo esta línea, la incorporación de actores como Salma Hayek o Tenoch Huerta podría obedecer a esto, pero también a una convicción firme de que llevar a la pantalla grande la diversidad que existe en la vida real.
Llega una drag queen
Pese a lo positivo que podría ser llevar la diversidad a las historias, a quienes no les gusta la inclusión pueden señalar que este tipo de esfuerzos son innecesarios, sin embargo, los datos son críticos, como lo señala Vanity Fair: «En 2019, tan solo en 22 películas de los principales estudios hubo diversidad LGTBI, es decir, un 18,6% del total. De ese porcentaje, el 68% eran hombres gays, solo un 36% de lesbianas, un paupérrimo 14% de personajes bisexuales y un 0% de personajes trans».
En este sentido, Marvel ha vuelto abrir el paso a la diversidad, esta vez de la mano de la cultura drag con la participación confirmada de Couleé, que si bien no se sabe aún qué papel tendrá dentro de la trama de Ironheart, consolida un avance clave para el MCU y la apertura que representa Victoria Alonso, que asegura a quienes no les gusta la inclusión en Marvel, que esta no es producto de ser políticamente correctos si no de un desarrollo de las historias.
«Lleva tiempo,tenemos muchas historias que podemos contar. Potenciaremos las que están, no cambiamos nada, solo estamos mostrando al mundo quiénes son estas personas».
Victoria Alonso, vicepresidenta de Marvel.
Y así lo han hecho, pues en 2020 anunció su primer héroe trans, que según algunas expeculaciones podría ser un personaje perteneciente al mundo de Thor, que cambia su identidad. Para Marvel, parece ser que la inclusión es un asunto de estrategia corporativa, pues como lo ha señalado su CEO:
«Fíjate en el éxito de Captain Marvel («Capitana Marvel») y de Black Panther («Pantera Negra»). Queremos que las películas reflejen a la audiencia y queremos que cada miembro de nuestra audiencia global se vea reflejado en la pantalla».
Kevin Feige, CEO de Marvel.
Si bien los resultados han sido polemizados por aquellos a los que no les gusta la inclusión, lo cierto es que en una sociedad donde 69 países aún condenan la homosexualidad, el 20% de las personas con discapacidad son pobres, en la que la violencia contra las mujeres aumenta y el racismo y el clasismo aún permean, las representaciones de estas comunidades en películas, que tienen millones de espectadores, podría reivindicar un poco la injusticia.
