¿Las compras de temporada son un momento de diversión y tiempo en familia, o un caso de consumismo excesivo? Es lo que se cuestiona en Sustainable Brands, puesto que durante eventos como Semana Santa, el uso de envases de plástico no reciclables para dulces y regalos es común, generando una gran cantidad de desechos. Entonces, cabe preguntarse: ¿realmente se está promoviendo un modelo de empresa sostenible?
En 2023, la Autoridad de Normas de Publicidad del Reino Unido (ASA) intensificó su lucha contra el lavado verde, emitiendo un número récord de resoluciones formales sobre sostenibilidad. Este año, la ASA se enfoca en la industria de alimentos y bebidas, utilizando nuevas herramientas de inteligencia artificial para evaluar las afirmaciones de sostenibilidad de las marcas. Por ello, es esencial reflexionar sobre la dicotomía entre el consumismo y la sostenibilidad.
¿Cuál es el problema con las compras de temporada?
En la sociedad moderna, el consumismo alcanza su punto máximo durante las temporadas festivas y celebraciones especiales. Estos eventos, como la Navidad, el Black Friday, el Cyber Monday y la Semana Santa, se han convertido en sinónimos de compras frenéticas, ofertas irresistibles y acumulación desmedida de bienes materiales. Sin embargo, detrás de la aparente alegría y emoción de las compras navideñas o los regalos de Pascua, se esconde un problema de proporciones significativas.
Durante estas temporadas, aumenta drásticamente la producción y el consumo de bienes, lo que conlleva una mayor extracción de recursos naturales, un aumento en la generación de residuos y una mayor emisión de gases de efecto invernadero. Por ejemplo, durante la Navidad, se incrementa la demanda de productos como juguetes, dispositivos electrónicos, alimentos y artículos decorativos, lo que implica un mayor uso de plásticos, embalajes y recursos no renovables.
Asimismo, ya que no se promueve un modelo de empresa sostenible, el consumismo estacional también ejerce una presión adicional sobre los recursos naturales, como el agua y la energía. La producción en masa de productos y el transporte asociado requieren grandes cantidades de agua y energía, contribuyendo así a la sobreexplotación de estos recursos y a un aumento en las emisiones de carbono.
Por otro lado, durante las festividades, se observa un aumento significativo en el desperdicio de alimentos. Las comidas copiosas y los excesos en la compra de ingredientes conducen a una mayor cantidad de alimentos desechados, lo que agrava el problema de la inseguridad alimentaria y tiene un impacto negativo en el medio ambiente debido a la generación de gases de efecto invernadero en los vertederos.
Consejos para ser un modelo de empresa sostenible
Las empresas aprovechan las festividades para lanzar campañas publicitarias persuasivas, ofrecer descuentos irresistibles y promocionar la idea de que la felicidad y la satisfacción personal están directamente relacionadas con la adquisición de productos. Con lo cual queda bastante claro que no se promueve un modelo de empresa sostenible, pero ¿cómo hacerlo? Estas son las propuestas de Sustainable Brands:
- Afirmaciones de sostenibilidad claras y verificables: Es fundamental que las empresas comuniquen claramente sus compromisos con la sostenibilidad y que estos sean verificables. Esto implica no solo afirmar objetivos ambientales y sociales, sino también respaldarlos con acciones concretas y transparentes.
- Diseño sostenible desde el principio: Integrar la sostenibilidad en el diseño de productos y servicios desde el principio del proceso de desarrollo es esencial. Esto implica considerar el ciclo de vida completo del producto, desde la obtención de materias primas hasta su disposición final, y buscar constantemente formas de minimizar el impacto ambiental.
- Transparencia a través de códigos QR: La inclusión de códigos QR en envases y materiales de marketing puede proporcionar un acceso fácil a información detallada sobre términos de sostenibilidad, prácticas sostenibles y la cadena de suministro. Vincular estos códigos a una página web dedicada o plataforma digital permite a los clientes conocer iniciativas ambientales, el ciclo de vida del producto y recibir consejos para reducir los residuos.
- Selección responsable de proveedores: Es importante seleccionar proveedores que compartan los valores de sostenibilidad de la empresa y que cumplan con estándares éticos y ambientales rigurosos. Esto puede implicar evaluar a los proveedores en función de su impacto ambiental, condiciones laborales y prácticas comerciales justas.
- Alianzas estratégicas para la sostenibilidad: Las empresas pueden fortalecer su impacto sostenible al formar alianzas estratégicas con organizaciones similares, ONG, instituciones académicas y gobiernos. Estas alianzas pueden ayudar a compartir conocimientos, recursos y mejores prácticas, así como a abordar desafíos comunes de manera más efectiva.
- Empoderamiento de los consumidores: Las empresas pueden empoderar a los consumidores brindándoles información transparente y educación sobre las opciones más sostenibles disponibles. Esto puede incluir etiquetas de certificación, información sobre el origen y el impacto ambiental de los productos, y programas de incentivos para fomentar comportamientos de consumo más responsables.
Siguiendo estos consejos, las empresas pueden no solo reducir su impacto ambiental y social, sino también fortalecer su posición en el mercado al satisfacer las demandas crecientes de consumidores conscientes y éticos.
Así, al adoptar prácticas empresariales sostenibles, las empresas pueden generar valor compartido, creando beneficios tanto para la empresa como para la sociedad en general. Desde la reducción de la huella de carbono hasta el fomento de condiciones laborales justas y la promoción de la igualdad de género, las acciones impulsadas por la Responsabilidad Social Empresarial pueden tener un impacto significativo en la construcción de un futuro más equitativo, próspero y sostenible para todas las personas.
