El Grupo de los Siete (G7) acordó tomar pasos para lograr cerrar las centrales eléctricas de carbón para 2035. Luego de varios años de que se planteara en foros mundiales la necesidad de abandonar los combustibles fósiles, esta decisión pone fecha para que las economías más avanzadas del mundo logren la necesaria transición energética.
La reunión del G7, conformado por Alemania, Canadá, Estados Unidos, Francia, Italia, Japón y Reino Unido, tuvo lugar en Turín, donde se discutieron diversos temas, entre ellos, la descarbonización, cuyas conclusiones constituyen un nuevo escalón en la lucha contra la crisis climática. Te decimos qué compromisos pactaron los Siete.
G7 acuerda abandonar los combustibles fósiles
Los ministros del G7 han acordado que sus países cerrarán las centrales de carbón a más tardar en 2035, según información de Forbes. Esta moción representa una decisión política crucial en materia de cuidado al medio ambiente, con la que las economías principales tendrán la oportunidad de mostrar al mundo que la transición energética es posible.
Andrew Bowie, ministro del Departamento de Seguridad Energética y Cero Neto del Reino Unido, dijo para Class CNBC:
«que las naciones del G7 se unan en la mesa para enviar esa señal al mundo —que nosotros, las economías avanzadas del mundo, nos comprometemos a eliminar progresivamente el carbón para principios de la década de 2030— es bastante increíble».
Andrew Bowie, ministro del Departamento de Seguridad Energética y Cero Neto del Reino Unido
El ministro añade que se trata de un pacto sin precedentes, que no se había podido concretar:
“Tenemos un acuerdo para eliminar progresivamente el carbón en la primera mitad de la década de 2030. Se trata, por cierto, de un acuerdo histórico, algo que no pudimos lograr en la COP28 de Dubai el año pasado»
Andrew Bowie, ministro del Departamento de Seguridad Energética y Cero Neto del Reino Unido
En definitiva, esta meta que fija como límite el 2035 para eliminar la energía proveniente del carbón, el más contaminante de la industria de los combustibles fósiles, representa un avance significativo hacia las energías limpias.
Estos son algunos de los compromisos de los Siete
Aunque todavía falta tener noticia del informe final que se publicará luego de las negociaciones del G7, algunos países han comunicado los planes que tienen para lograr abandonar los combustibles fósiles en los próximos años, pues aunque sólo el 16 % de la energía que usan los miembros del Grupo proviene del carbón, aún hay muchas medidas que tomar para lograr el objetivo acordado en estas reuniones.
Por ejemplo, Italia ha producido el 4.7 % de su electricidad total del año pasado con las seis centrales de carbón que tiene en funcionamiento, pero Roma ha señalado sus planes de clausurar sus centrales para 2025 y sólo la que se encuentra en Cerdeña funcionará hasta 2028.
En el caso de Japón y Alemania, el 25 % de la electricidad de estas naciones provino del carbón en 2023, por lo que el reto es aún mayor y más difícil de enfrentar. Sin embargo, en la reunión del G7 liderada por japón, dicho país aseguró que adoptaría medidas sólidas para eliminar progresivamente el uso de energías provenientes del carbón.
Por su parte, la Agencia de Protección del Medio Ambiente de Estados Unidos comunicó la semana pasada que habrá nuevas leyes con las cuales las centrales eléctricas de carbón estarán obligadas a capturar la mayor parte de su contaminación o tendrán que terminar sus operaciones para 2039.
¿El COP28 tiene su verdadero cierre aquí?
A finales del año pasado se llevó a cabo la 28ª Conferencia de las Partes de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático en Dubai, donde según información de las Naciones Unidas, por primera vez casi 200 naciones reconocieron la ineludible necesidad de abandonar los combustibles fósiles. El Secretario Ejecutivo de las Naciones Unidas para el Cambio Climático, Simon Stiell, declaró en el discurso de clausura del evento lo siguiente:
«Aunque en Dubai no hemos pasado página a la era de los combustibles fósiles, este es el principio del fin»
Simon Stiell, Secretario Ejecutivo de las Naciones Unidas para el Cambio Climático
No obstante, se ha señalado que una de las deficiencias de este macro evento fue no poner una fecha límite para la descarbonización. De esta forma, la reciente reunión del G7 da cierre y solidez a la COP28 al señalar la meta a cumplir para 2035, al menos en los siete países miembros.
Generalmente, las iniciativas y propuestas que adoptan los miembros del G7 suelen tener amplia influencia en las directrices que seguirán los miembros del G20, razón por la que el efecto de esta cumbre suscitada en abril seguramente se extenderá a otros de los países que generan grandes emisiones y son miembros de este segundo grupo.
Afortunadamente, parece que el COP28 no ha olvidado los retos que la descarbonización implica para las economías en desarrollo y para los grupos más vulnerables.
En este sentido, António Guterres, Secretario General de la ONU, declaró que la era de los combustibles fósiles requiere terminar con justicia y equidad e hizo un llamado a apoyar a los países en desarrollo durante este proceso de transición.
Abandonar las combustibles fósiles es una labor continua que demanda un enfoque socialmente responsable por parte de cada nación para evitar que la brecha de desigualdad crezca entre los más propensos.