«Ya no hace falta ser adicto para sentir en carne propia el poder de las adicciones», dijo el sinaloense de 31 años Luis Arturo León Taveras, que coordinó la construcción del Museo Interactivo contra las Adicciones, un espacio dentro del Modular Inés Arredondo (MIA) construido a su vez en el área que dejó el demolido Teatro de la Ciudad «Inés Arredondo», atrás de la Catedral de Culiacán.
El MIA, que incluye centro de espectáculos teatrales y el museo contra las adicciones, fue inaugurado el pasado jueves por el Gobernador de Sinaloa Jesús Aguilar Padilla. A partir de entonces comenzaron a funcionar la mitad de las 15 museografías del museo.
Vía telefónica, León Taveras dijo que después de enero el recinto se terminará por completo y que su meta es conseguir la visita de 100 mil personas al año. «Debemos apostarle a una nueva generación de jóvenes, no tanto a las armas y a la intervención militar sino a elevar el nivel educativo y cultural, y que este tipo de modelos de prevención pueden ser importantes para permitir al usuario vivir las experiencias en carne propia».
La construcción del MIA empezó hace dos años sobre un terreno de 2 mil metros cuadrados. El área de exhibición sobre las adicciones es de unos 700 metros cuadrados y los contenidos fueron asesorados por personas como Nora Volkow, directora del Instituto Nacional sobre el Abuso de Drogas de Estados Unidos. «Nuestro modelo es la aplicación e interacción de tecnologías», dijo León Taveras.
El museo busca ayudar a los visitantes a experimentar sobre las adicciones a la droga, al alcohol, al tabaco, a los juegos, al Internet y también, a la anorexia y a la bulimia.
En un salón de juegos simulado se muestra con videos hasta dónde es capaz un hombre de perder con tal de seguir jugando, según el coordinador. En otro, se simula un bar donde hay intercambio de drogas; se recrea la vida y la muerte de una persona adicta a las metanfetaminas y también un pulmón gigante maltrecho por el tabaquismo.
Narcocultura Marcada
«Culiacán ocupa el lugar 14 en adicciones a nivel nacional.
El problema quizás no es tanto el consumo de las drogas, sino una narcocultura muy marcada. Yo creo que debemos prevenir antes para que las adicciones no lleguen», señaló León Taveras, director también del órgano paramunicipal encargado de la administración del MIA.
La inversión en el nuevo centro educativo fue superior a los 120 millones de pesos, la mayor parte puestos por el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (Conaculta). Unos 40 millones fueron para las salas y el software, armado en Chile y México, según León Taveras.
El MIA fue proyectado para concluirse en septiembre pasado con un costo de 112 millones de pesos. Se decidió abrirlo antes de que concluyera el año, aunque faltan algunos aspectos físicos por montar.
El día de la inauguración, el Gobernador Jesús Aguilar Padilla comparó el recinto con una «vacuna virtual», en las actuales condiciones de Sinaloa que hasta inicios de noviembre sumaba mil 795 ejecutados.
León Taveras, que estudió leyes en Guadalajara, resaltó que el Museo Interactivo contra las Adicciones tiene un enlace con el centro para el tratamiento de personas con problemas de adicciones Oceánica. «En una sala damos un diagnóstico y luego los canalizamos», dijo.
Fuente: Reforma, Cultura, p. 18.
Reportera: Jorge Ricardo.
Publicada: 27 de diciembre de 2010.
