Justo antes de su traslado de regreso a EU, Nissan nos invitó a realizar una prueba de manejo en el kartodromo de Cancún, para comprobar el buen desempeño, comodidad y conveniencia, de este auto que por su tecnología será un parteaguas en la historia del automóvil en el mundo, pero que no pierde nada en espacio, comodidad e incluso los lujos a los que están acostumbrados los clientes de autos compactos, accesibles pero bien equipados.
Su estilo a primera vista es de un hatch-back compacto muy similar en dimensiones al Tiida hatch, que ofrece un sensacional espacio interior y una cajuela razonable, ya que la batería, que es bastante grande, se ubica debajo de los asientos, dejando espacio libre atrás. En el frente se ubica el conjunto motriz y en la parte frontal, justo debajo del logo de la marca, están los conectores para la recarga, son dos porque depende si se hará a 110 o 220 w; con éste último tarda alrededor de 8 horas en hacer la carga completa de la batería. Cuenta además con celdas solares en el spoiler trasero que recargan la batería tradicional y que alimentan a los accesorios y luces del vehículo.
Por dentro es un auto bien equipado y terminado para el segmento medio, con muy buen espacio. El tablero marca instrumentos distintos a lo que tradicionalmente vemos, ya que importa más que nada la carga de la batería y el rango que nos queda, además de la velocidad. En la pantalla del tablero central, además del audio y sistema de navegación, despliega información del consumo eléctrico así como la regeneración que se da al soltar el acelerador y al frenar.
Lo más interesante es sin duda el tren motriz que no incluye motor de combustión, ni siquiera para recarga de la batería, como sucede con otros en el mercado para darle un rango extendido. El Leaf no tiene tubo de escape, como presume Nissan, ya que solamente cuenta con un motor eléctrico síncrono que genera 107 hp y 207 libras de torque de manera instantánea. La transmisión es tan sólo un engrane reductor, no hay cambios, y palanca tipo joystick permite seleccionar marcha adelante, atrás, neutral y en la parte superior está el botón de «Park» para trabar la transmisión.
La suspensión es independiente adelante con sistema MacPherson y con eje torsional atrás, que para el tipo de auto es adecuado. Los frenos son de disco ventilado en las 4 ruedas y además de las asistencias ABS, de frenaje y de reparto de fuerza; obviamente tiene también recarga regenerativa que funciona al frenar.
El manejo es sorprendente, cuenta con llave inteligente por lo que se aprieta el botón de start con el freno pisado y se ilumina el tablero para indicar que está listo, pero no hay ruido. De hecho es tan silencioso que se le tuvo que poner un ruido artificial para protección de peatones.
Aunque su uso está orientado a ciudad, por su rango de 160 km (que pueden variar por temperatura, uso de accesorios y aire acondicionado, aceleraciones, etc.), su desempeño es similar al de un sedan mediano con V6. Su aceleración es muy suave pero fuerte y constante, sobrada para un arranque rápido o incorporarse a una vía rápida. El frenaje también es fuerte y modulable, similar al de cualquier auto de su categoría a la venta hoy.
La calibración de la suspensión este orientada al confort, ya que eran unidades con especificaciones para EU. Cuando llegue a México oficialmente, seguro tendrá ajustes en las especificaciones para un mejor curveo y resistencia en nuestras caIles y carreteras.
La verdad es que el Leaf nos sorprendió muy gratamente en su manejo, nos parece que para uso citadino es mucho más que adecuado, pero su rango actual es un poco limitado si quisieran viajar con él. Nissan lo sabe y trabaja para crecer el rango en productos futuros, pero están seguros del éxito del Leaf y ya preparan también una van de pasajeros y carga, así como un auto lujoso bajo la marca Infiniti. El precio en México no puede determinarse por ahora, pero en EU hay un importante apoyo gubernamental de $7,500 dólares del gobierno federal, más algunos apoyos adicionales de algunos estados, por lo que se puede comprar un Leaf desde 20 mil dólares. Sus costos de mantenimiento son casi nulos, y la operación se calcula en un 25% de lo que cuesta un auto que consume gasolina. i iNada mall! Esperemos que nuestro gobierno ofrezca también apoyos atractivos… bueno, soñar no cuesta.
Fuente: Revista Día Siete, p. 20.
Publicada: 30 de enero de 2011.
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