La Pyme regia Diram, se dedica a reducir la energía que los grandes industriales contratan a la CFE para que funcione su maquinaria pero que no utilizan para generar trabajo.
Con equipos que se conectan a sus subestaciones o a la red eléctrica, logran ahorros de entre 450 y un millón de pesos mensuales para sus clientes, aseguró Rafael Gómez, director general de Diram.
Los clientes de Diram ya son 90 por ciento de las grandes empresas del sector acerero, minero, cementero, automotriz y papelero que tienen facturas de luz de unos 15 millones de pesos mensuales, señaló Gómez.
Con 19 años en el mercado, Diram es ya proveedor de empresas del tamaño de Ternium, AHMSA, DeAcero, Cemex, Ford y Coparmex, entre otros. Realiza proyectos en Latinoamérica y Estados Unidos y en los pasados dos años abrió oficinas en Guadalajara, Distrito Federal y Houston, manifestó Gómez.
El modelo que ha dado éxito a la Pyme está en un contrato de desempeño que ha resultado atractivo, pues las empresas no tienen que invertir recursos económicos en los equipos para ahorrar. Los gastos se pagan con los ahorros generados en un periodo de 12 a 48 meses.
«Manejamos esquemas sin inversión ni riesgo para los consumidores, nosotros invertimos en la solución, hacemos la ingeniería y dejamos un equipo llave en mano y luego los ahorros que se generen los compartimos por un periodo de tiempo para que al final el cliente se quede con los ahorros», explicó Gómez.
Así Diram, que actualmente cuenta con alrededor de 40 empleados, ha crecido en ventas a un ritmo de entre 35 y 40 por ciento anual durante los últimos 6 años, aseguró Gómez.
Los equipos que utilizan incluyen bancos de capacitores, que se conectan en algún punto de la red eléctrica interna o en el tablero principal de las subestaciones de las empresas y cancelan los kilo volts amperes «reactivos» que utilizan los motores de los aparatos eléctricos para funcionar pero que no se consumen y provocan un cobro por parte de la paraestatal eléctrica.
También filtros de armónicas, que se colocan para asegurar el buen funcionamiento de los bancos de capacitores, en caso de la presencia de corrientes armónicas en el sistema eléctrico.
Fuente: Reforma, Negocios, p. 9.
Por: Alejandra Buendía.
Publicado: 12 de diciembre de 2011.