Sin darnos cuenta los muebles de nuestra casa o la bolsa de la compra nos puede convertir en ciudadanos sostenibles. La cocina, las puertas, los armarios, o el marco de un espejo pueden ayudar a mantener nuestros bosques y a optimizar sus ventajas. No es ciencia ficción, el invento se llama PEFC.
El sistema PEFC (Programa para el Reconocimiento de la Certificación Forestal) es el encargado de acreditar y asegurar que nuestros bosques, montes o dehesas son sostenibles. ¿Pero qué quiere decir un bosque sostenible? Se refiere a aquellas zonas verdes que son administradas de una manera tal que mantienen su vitalidad, productividad, biodiversidad y capacidad de regeneración. “Son bosques que aseguran una perdurabilidad en el tiempo y en las condiciones más óptimas”, explica Ana Belén Noriega Bravo, secretaria general de PEFC.
La certificación PEFC se puede hacer a nivel regional, particular, o para pequeñas y medianas empresas. Este certificado garantiza al consumidor que la materia prima de que están hechos los productos proviene de un bosque bien gestionado, es decir, que tiene garantizada su sostenibilidad porque se ha exigido la aplicación de criterios ecológicos, económicos y sociales basados en estrictos requisitos acordados internacionalmente.
Este sistema de certificación forestal ya cumple diez años de trabajo que los ha situado en el primer escalón de la certificación forestal mundial. En todo el planeta, PEFC ya ha certificado más de 200 millones de hectáreas de bosques, es decir un 68% de los bosques del mundo que equivaldría a la mitad de la superficie de la Unión Europea.
España ya tiene más de un millón de hectáreas certificadas, lo que supone un 6% de los bosques nacionales, mientras que en Europa la certificación forestal sobrepasa el 50% de las tierras: “Tenemos que concienciar más a la sociedad, tener este certificado supone una gran ayuda para nuestra naturaleza, garantiza la regeneración de los bosques y contribuye al mantenimiento de los suelos, del agua, la biodiversidad y la perdurabilidad de los bosques como sumideros de CO2”, explica la secretaria general de PEFC.
Los más sostenibles
Navarra, La Rioja, Castilla y León y el País Vasco, son las comunidades autónomas que van a la cabeza de bosques sostenibles. Tienen un certificado solidario gracias al cual se mantiene controlado que tanto el suelo público como el privado asegure que van a seguir los criterios ecológicos necesarios que ayuden mantener la naturaleza y a sacarle partido de la forma más saludable posible.
Desde la esfera privada ya hay 22.840 empresas españolas que tienen la certificación PEFC: “Empresas como Inditex nos han llamado para solicitarnos que todas las bolsas de cartón de ZARA vinieran con certificado de sostenibilidad. Lo mismo ha pasado con la ONCE, con Sacyr-Vallhermoso o con empresas como Finsa”, explica Noriega.
La sostenibilidad no es sólo un término en boga. El cuidado de nuestra ecosistema ha pasado a ser una responsabilidad, y en el caso de las empresas un valor añadido que atrae a los consumidores. El mito de que el ‘ser ecológico’ sale más caro, se rompe cuando nos encontramos con los certificados PEFC: “Para el cliente no supone ninguna variación en el precio comprar un producto que tenga el sello de certificación a una que no lo tenga, y evidentemente el primero supone una gran ayuda al medio ambiente”, dice Ana Belén Noriega Bravo.
Ahora sólo falta estar atento y fijarse en los productos que certifiquen la sostenibilidad de nuestros bosques. Con muy poco todos podemos ser ‘ciudadanos sostenibles’.
Fuente: Nueva tribuna