Muchas de las multas históricas que fueron impuestas por la Comisión Federal de Competencia (CFC), se han quedado en el camino o tardan años en cobrarse debido a los recursos legales que interponen las grandes empresas, según información obtenida a través del Instituto Federal de Acceso a la Información.
Entre el 2007 y el 2013, empresas como Telcel, Telmex, los laboratorios Elli Lilly, PISA, Cemex y Televisa han recibido sanciones millonarias, pero se quedaron solo en anuncio porque la mayoría se encuentra en juicio y otras fueron revocadas.
«Nosotros no somos los que cobramos las multas, las cobra el SAT (Sistema de Administración Tributaria) e inmediatamente ante la acción del SAT de cobrarlas, se amparan y les conceden la suspensión, entonces la multa no se aplica sino hasta que el caso está cerrado. Ya no nos corresponde a nosotros el cobro final de las sanciones», explicó Eduardo Pérez Motta, presidente de la CFC.
La más alta fue la mega multa de 11 mil 989 millones de pesos en contra de Telcel, que le impuso el órgano antimonopolios en 2011. Esta fue revocada después de cinco años de haberse integrado el expediente, según información del órgano antimonopolios.
Pérez Motta explicó que este resultado se dio debido a que la compañía asumió una serie de compromisos que mejoraría el ambiente competitivo en el mercado de telefonía celular, con la reducción de tarifas de interconexión.
Por otra parte, en el año 2010, la CFC impuso una multa de 150 millones de pesos a seis laboratorios por coludirse para beneficiarse de las licitaciones del Instituto Mexicano del Seguro Social.
A pesar de que el expediente data del 2006, los laboratorios Fresenius Kabi, PISA y Eli Lilly aún mantienen un juicio con lo cual evitan pagar 21.5 millones cada una.
En este caso, las empresas que ya liquidaron la sanción son Laboratorios Cryopharma, Probiomed y Baxter.
Pérez Motta dijo que en otros países, las empresas sancionadas primero pagan la multa, aunque interpongan un juicio, y si los tribunales les dan la razón, se les regresa el dinero.
En México, sucede al revés, ya que las multas se pretenden cobrar hasta el final del proceso, que puede tardar años.
Entre las sanciones más recientes está la que recibió Telmex, por 638 millones de pesos y su filial Telnor por otros 19 millones, en enero de este año, debido a que negó el arrendamiento mayorista de enlaces dedicados locales y de larga distancia a la telefónica Axtel. No obstante, ambas se encuentran en juicio.
Fuente: Reforma
