La tendencia del mundo actual es que las empresas inviertan y apoyen cada vez más las medidas que ayudan a preservar el medio ambiente, combatir el cambio climático e influir positivamente en la sociedad. Sin embargo, el nuevo informe anual de inversiones de la sociedad estadounidense de administración de activos, revela que el apoyo de BlackRock a ESG va a la baja.
Si bien, desde hace ya varios años se ha señalado una notable disminución en el respaldo a los parámetros sociales, ambientales y de gobernanza (ESG) por parte del gigante administrador de activos, cuyo CEO, Larry Fink, parece restar un poco más de importancia a estos indicadores en cada nuevo informe anual de la compañía, esta noticia sigue sorprendiendo a quienes, de manera optimista, pensaron que dicha empresa no podía ir a menos en este ámbito.
Lamentablemente, esta empresa no es la única que muestra una baja en el rendimiento asociado con estos indicadores. Te decimos qué tanto respaldo a ESG hubo de parte de BlackRock y otros gestores de inversión. ¡Sigue leyendo para enterarte!
Apoyo de BlackRock a ESG disminuye…
Según el último informe anual de inversiones de BlackRock, el apoyo a propuestas sociales y ambientales en el seno de la empresa ha experimentado una baja considerable en los últimos años. En 2021, la corporación estadounidense apoyó el 47% de las propuestas ambientales y sociales presentadas por sus accionistas, mientras que en 2023 la cifra cayó radicalmente hasta el 7% de respaldo a este tipo de iniciativas.
Sin embargo, este año la compañía sorprende con una nueva disminución, ya que sólo apoyó 20 de las 493 propuestas, lo que significa que tan sólo estuvo de acuerdo con invertir en 4% del total de ellas, mientras que se nota un incremento en el apoyo a acciones relacionadas con la gobernanza corporativa, en las que la empresa votó en pro de 79 de las 374 propuestas, esto es, 21% de ellas, frente al 11% aprobado el año pasado.
De acuerdo con información del diario Financial Times, este retroceso alarmante en la inversión relativa a propuestas ambientales y sociales por parte de las empresas se da a causa de la politización de estos dos ejes de acción.
¿Cuáles son las razones de BlackRock para este retroceso?
BlackRock argumentó que había votado por cerca de 867 propuestas de accionistas en total, pero desertó en la mayoría al ver que muy pocas de ellas, principalmente en materia social y ambiental, beneficiaban a sus clientes en términos económicos, tal como lo expresó Joud Abdel Majeid, director global de gestión de inversiones de la empresa, quien considera que muchas de las propuestas de este año fueron
“demasiado prescriptivas, carentes de mérito económico” o que pedían a las empresas intervenir en “riesgos materiales que ya están gestionando”
La corporación actualmente dirigida por Fink aseguró que el 61% de sus votos negativos sobre cuestiones climáticas y sociales se debió a que la empresa ya contaba con “un proceso en marcha para abordar el riesgo empresarial” relacionado con el tema.
Por otro lado, se asume que el número de votos en contra por parte de los socios de BlackRock se debe a la oposición a 88 propuestas anti-ESG impulsadas por conservadores cuyo objetivo es impedir que las compañías aborden este tipo de cuestiones.
Otras empresas retroceden tras ejemplo de BlackRock
Desafortunadamente, el poco apoyo de BlackRock a ESG ha influido en que el respaldo general de otras empresas a estas medidas también disminuya en sus respectivas reuniones anuales. Muestra de ello es que, según información de ISS-Corporate, el apoyo medio de las empresas del índice Russell 3000 para las propuestas ambientales fue del 21% y del 18% para las sociales, mientras que sólo dos de ellas recibieron apoyo de la mayoría.
Ambientalistas como Lara Cuvelier, del grupo de presión francés Reclaim Finance, también han mostrado su disgusto por la falta de RSE de la empresa estadounidense:
“Está defraudando a los ahorradores y pensionistas que invierten en sus fondos y quieren proteger su futuro frente al cambio climático”
Otros ambientalistas hablan de la ambición por tate de las corporaciones como el motivador de su baja activismo en el cuidado al medio ambiente, como es el caso de Felix Nagrawala, que dirige la investigación de ShareAction y encuentra absurdo el argumento de BlackRock sobre la falta de “méritos económicos” de las propuestas sociales y ambientales:
“Los gestores de activos más importantes están intentando quedarse con todo…Decir que las resoluciones no tienen mérito económico no tiene sentido, dado que el cambio climático afectará materialmente a toda una gama de sectores diferentes”.
La creciente disminución en el apoyo de BlackRock a ESG refleja una tendencia preocupante en el ámbito de las inversiones. A pesar de las demandas sociales respecto a una mayor RSE, la compañía ha reducido significativamente su respaldo a propuestas sociales y ambientales, priorizando criterios económicos inmediatos sobre la sostenibilidad y el futuro de nuestro Planeta.
Este retroceso no solo afecta la percepción de BlackRock como líder en inversiones responsables, sino que también está influyendo negativamente en el apoyo general hacia las medidas ESG en otras compañías. En un contexto donde la acción ambiental y social se vuelve cada vez más crítica, la falta de compromiso de gigantes financieros como BlackRock representa un riesgo para nuestro mundo, que pide a gritos acciones contundentes para enfrentar la crisis climática.