Más de 1.2 millones de adolescentes mueren cada año en todo el mundo, en promedio hay 3,000 muertes por día. Según el nuevo informe de la Organización Mundial de la Salud (OMS) la mayoría de las causas son prevenibles.
En 2015, la principal causa de muerte entre los jóvenes de 10 a 19 años de todo el mundo, fueron los accidentes de tránsito, que mataron a más de 115,000 personas, seguida de infecciones respiratorias inferiores y autolesiones.
El nuevo informe publicado asegura que dos tercios de las muertes entre adolescentes ocurren en Asia y África.
Destaca también que para poder prevenir las muertes se necesita dar apoyo a los adolescentes y mejorar los servicios de salud, educación y asistencia local.
“Los adolescentes han estado absolutamente ausentes de los planes nacionales de salud durante décadas”, dijo la doctora Flavia Bustreo, subdirectora general de la OMS, en una declaración.
“Inversiones relativamente pequeñas ahora, enfocadas en los adolescentes, no solo tendrían resultados en la salud y empoderarían a los adultos para desarrollarse y contribuir de manera positiva en sus comunidades, también resultarían en futuras generaciones más sanas, lo que produciría enormes rendimientos”, agregó.
La mala alimentación, falta de ejercicio y un comportamiento sexual arriesgado, puede impactar la salud a lo largo de la vida de una persona, es por eso que se necesita darle importancia a la salud del adolescente, pues es en esa edad donde los problemas empiezan a surgir.
Como lo mencionamos antes, los accidentes de tránsito en adolescentes es la mayor causa global de muerte, la información mostró que los más perjudicados son los jóvenes que tienen entre 15 y 19 años; sin embargo, la mayoría de las víctimas no conducían sino que eran peatones y ciclistas.
En la mayoría de las muertes por accidente de tránsito, el adolescente es una víctima pasiva”, dice Ross. “Solo en una proporción muy pequeña era el conductor”. Aunque esa proporción aumenta en países de ingresos altos, agrega.
Recomendaciones
Algunos expertos dicen que se debe mejorar los servicios de atención en salud, incluyendo un mayor apoyo social y mental y también “reconocer el valor y el rol que las familias y las comunidades deben jugar”, todo esto para reducir las cifras.
“Los padres, las familias y las comunidades son extremadamente importantes, pues tienen el gran potencial de influenciar positivamente el comportamiento y la salud del adolescente”, señaló en una declaración el doctor Anthony Costello, director de Salud Materna, Neonatal, Infantil y Adolescente de la OMS.
“Hay evidencia muy contundente de que la paternidad marca una gran diferencia en los riesgos de salud de los adolescentes”, agrega Ross.
También se recomienda que se implemente o se haga más énfasis en la educación sexual en los colegios. Al mismo tiempo del uso de cinturones de seguridad cuando se usa el automóvil y cascos obligatorios cuando se utilice la motocicleta o la bicicleta..
Para Ross, se ha subestimado el valor que esto podría traerle a la población mundial. “Los adolescentes son un recurso increíble para la sociedad. Necesitan ayuda y ser educados para serlo”.
