El director de Acciona Windpower, Miguel Ángel Alonso, comentó en entrevista que las plantas eólicas Oaxaca II, III y IV que desarrolla bajo el esquema de Productor Independiente de Energía, con capacidad global para 304 Mw, entrarán en operación en diciembre próximo, conforme al contrato por alrededor de 600 millones de dólares.
La empresa ibérica fue la que puso en marcha el proyecto Eurus I en el esquema de coabastecimiento de CEMEX con capacidad para 200 Mw y pondrá en marcha la segunda fase de ese corredor eólico de casi 50 Mw.
Eso significa que sólo los proyectos asignados a esa desarrolladora de energía eólica superarán los 550 Mw, en el Istmo de Tehuantepec, Oaxaca, pero el directivo aseguró que la empresa tiene puestos sus ojos en proyectos para otros estados con altos índices de vientos que hacen rentable la instalación de aerogeneradores.
Informó que la empresa sostiene pláticas con compañías interesadas en participar en proyectos bajo el esquema de autoabastecimiento y que en su momento evaluará dónde conviene más instalarlas, ya que estados como Tamaulipas y Baja California ofrecen también buenas condiciones de viento para la operación de esas centrales que utilizan ese recurso natural como insumo.
«Estamos en proyectos por más de 550 Mw y no vamos mal, pero ya le dijimos al gobierno que vamos por mil 500 hacia el 2015, pero México se está acostumbrando a grandes proyectos de 50 Mw o más y las energías renovables tienen que ser muchos con poca capacidad y no de pocos con mucha capacidad.
Nosotros (Acciona) defendemos ante la Comisión Reguladora de Energía (CRE) y la Secretaría de Energía (Sener) el modelo europeo, donde prevalecen pequeños corredores eólicos de 20 o 30 Mw por todo el país, que hacen de esa alternativa una energía más confiable porque el día que se paren los grandes molinos, no sé qué va a pasar», añadió.
Sobre los proyectos Oaxaca II, III y IV, que desarrollan, el entrevistado recordó que la compañía a su cargo ganó la licitación porque ofreció el precio más competitivo a CFE de 6.5, 6.7 y 6.3 centavos de dólar por kilovatio/hora, respectivamente.
Sin embargo, aclaró que esa tarifa está supeditada a que los proyectos operen con cuatro mil horas equivalentes de viento en el año, ya que el año tiene ocho mil 760 horas pero las turbinas requieren cuatro mil horas equivalentes a la velocidad estándar para funcionar.
En caso de que el viento soplara menos de las horas mínimas requeridas, Acciona aumentaría la tarifa por kilovatio/hora, pero confió en que el elevado potencial de viento que predomina en la región permita mantener las tarifas en los precios pactados.
El istmo está respondiendo (en el caso del proyecto Eurus) a la bonanza de vientos y las horas equivalentes, por lo que «no esperaríamos que la tarifa para la CFE tenga que subir porque al final ganamos por ofrecer la mejor tarifa. Esperamos que los vientos se comporten como está previsto y que los proyectos sean rentables», insistió.
Fuente: El Financiero, Negocios, p 18.
Por: Esther Arzate.
Publicada: 18 de mayo de 2011.
