Por: Emilio Guerra Díaz
Hemos tomado prestado el nombre de esta colaboración del programa de “Es la hora de opinar” que conduce Leo Zuckermann y Javier Tello en Foro TV canal 4, a propósito de la transmisión de su programa del martes 6 de mayo a las 22:00 horas.
Los analistas abordaron este tema por el gran revuelo que hizo Alfonso Cuarón con sus 10 preguntas al Presidente Enrique Peña Nieto sobre la reforma energética, las respuestas que dio el gobierno y la última petición del cineasta: “¿Por qué no lo discutimos públicamente?”.
Independientemente de las opiniones vertidas sobre esos hechos, lo que destacó en Foro TV fue el análisis que hizo Javier Tello respecto al activismo político que hacen los famosos para que con su presencia incidan en aperturar espacios de discusión a favor de la opinión pública o de organizaciones de sociedad civil.
Zuckermann preguntó: “¿Se vale usar la fama para incidir en temas públicos?” Ambos coincidieron en que sí, pero hay considerandos. Para Javier Tello es un fenómeno “muy reciente” que celebridades se involucren; lo hacen porque la celebridad se transforma en algo que vende. Por ello muchos políticos buscan a famosos como Bill Clinton o Bono, líder de U2.
“¿Qué tan eficiente es involucrarlos?” Tello indica que hay varios riesgos. Utilizar la fama para que tus opiniones tengan más eco o más peso es quizá un objetivo de este activismo.
Javier Tello hizo un análisis sobre las críticas más comunes (que no son necesariamente su opinión personal) en contra del activismo de una celebridad. Señaló que hay tres grandes grupos de argumentos por los que transita la crítica de que famosos sean activistas políticos:
1) La validez de su participación
2) Será válido pero no es eficaz
3) Puede ser válido y eficaz, pero puede ser riesgoso tanto para la celebridad como para la causa
A partir de ahí se combinan los argumentos en las siguientes afirmaciones recapituladas por Javier Tello:
• En ocasiones la causa es eclipsada por la celebridad: “Ya no es la causa de África, sino la de Bono”
• La celebridad simplifica la complejidad del problema, de ahí que tenga que hacer alianzas con expertos u OSC conocedoras de la temática
• La fama y la celebridad se convierten en un tema dominante donde se presenta el dinero. Debe de tener su lugar pero no debe colonizar otras áreas. El dinero compra más donde no debe de tener un efecto. Al activista le da derechos donde no debe tenerlos. Los publirrelacionistas de la celebridad le dicen “necesitas una causa”, adoptan una pero no hay convicción sino que se hace por imagen, relaciones públicas para beneficio de su imagen personal, carrera o su bolsillo
• Se corre el riesgo de que ciertos activismos sean ineficaces pues no hay un genuino interés de la celebridad en la causa
• A menudo las celebridades ofrecen soluciones técnicas a los problemas complejos cuya solución también está en el terreno político. No se meten en ese campo porque tiene un costo muy alto. Tello y Zuckermann recuerdan el caso de Bob Geldoff. A la postre él fue más conocido por su campaña a favor de África que como músico
• Los críticos dicen “zapatero a tu zapato”, la gente prefiere ver a Bono cantar que hablar de la deuda del tercer mundo. ¿Vale usar tu fama para ello? Interrumpe Leo a Javier. Tello responde: “No se vale si es paternalista, si le causas daño a la causa y si no es genuino”
• “Fama mata causa”. Angeline Jolie tiene compromiso con diversas causas que defiende, pero para los medios de comunicación no es la causa lo importante sino lo que ella dice. Su activismo, según Tello, es ineficaz pues genera una conciencia superficial. Permite llegar a más gente pero a nivel superficial. Genera conciencia pero no acción
• La ineficacia es otra razón de la crítica. Se registran casos con consecuencias no intencionadas. En el caso de los conciertos a favor de recaudar alimentos para África, Geldoff y Bono generaron una imagen del continente profundamente negativa. Ellos dos tratan de motivar a occidente para apoyen pero la imagen negativa es difícil de revertir
• Algunas actividades que son necesarias realizar para la causa adquieren un tinte de eventos de celebridad donde lo importante es la foto, la cena, el glamour, etc.
• Ciertamente también hay peligros y abusos: Que se circunscriben cuando el activismo se queda en relaciones públicas o en el narcisismo del famoso, ya que hacen que la causa se quede lejos
• Mezclar la reputación del individuo con la causa. Si tienes un mal comportamiento ético “le das en la torre”. Se tiene el caso de Lanz Armstrong, de Livestrong pasó a la falta de credibilidad generalizada y hasta el repudio. Otro caso citado por Javier Tello es el de Naomi Campbell, en un tiempo fue vocera de una OSC contra el consumo de pieles y cuando terminó un contrato comercial decidió modelar abrigos de piel
Activistas y cultura de participación ciudadana
A nuestro juicio algunas de las críticas compartidas por Javier Tello requieren ser contextualizadas en una cultura de participación más activa que la que se tiene en México. En países con filantropía moderna, se registran personas que no solamente se abocan a una causa, sino que son simpatizantes de varias organizaciones. Participan activamente en: Organizaciones barriales, políticas, educativas y culturales y desde luego filantrópicas.
Algo similar sucede con países latinoamericanos que vienen de una dictadura militar, los casos más sobresalientes son Chile y Argentina. Ello explica que en Chile que tiene menor número de habitantes tenga más organizaciones civiles que en México. Brasil transitó por otro camino de participación ciudadana menos afortunado y guarda muchas similitudes con México, que también tiene un nivel bajo de participación cívica.
En países con tradiciones filantrópicas de carácter desarrollista, la participación de famosos como activistas además de ser bien vista, socialmente es necesaria para todos como un acto de retribución a la comunidad que le ha permitido sobresalir. Recuerde el lector que muchas de esas prácticas provienen de otra tradición religiosa que fomenta el interés comunitario y mandata una actitud participativa en lo público.
Before the fame
Independientemente de los acertados comentarios respecto al activismo político de los famosos compartidos en “Es la Hora de Opinar”, lo cierto es que el activismo y voluntariado están ampliamente correlacionados. Al activismo también se le puede identificar con cargos honorarios que conceden algunas organizaciones a sus voluntarios. Esta manera César Costa es Embajador de Unicef en México. Presta su imagen. El activista incluso puede ser vocero de una organización como sucede con Benny Ibarra con Save The Children.
Muchos personajes hoy ampliamente conocidos, ya habían desarrollado actividades altruistas o de activismo antes de la fama. El mismo Bono, varias veces citado por Javier Tello, era simpatizante de dos organizaciones mundiales: Amnistía Internacional y Greenpeace mucho antes de encontrarse con la fama.
En la mayoría de los casos un activista es un voluntario, es decir, no recibe remuneración económica por las actividades que realiza. En cambio, dispone de su tiempo para apoyar las causas. Incluso, en no pocas ocasiones acaba poniendo dinero de su bolsillo para los fines que se ha propuesto.
Como activista y voluntario una celebridad promueve la educación cívica. Desarrolla el sentido de corresponsabilidad. Estimula en sus seguidores el pensamiento respecto a que los bienes de hoy tienen un arraigo en el pasado: “Alguien me ayudó o fue responsable de la creación de bienes y servicios que hoy disfrutamos, por lo tanto debo ayudar a otros para un mejor futuro”. Con esta actitud desarrollan el sentido pertenencia a una comunidad.
Las celebridades como activistas dan sentido social al interés público, es decir, contribuyen a que la comunidad comprenda que los problemas tienen diversas complejidades pero que no sólo es función del gobierno resolverlos, sino también es una corresponsabilidad de actores sociales. Por ello lo público es la acción de gobierno y ciudadanía en conjunto.
Con ello contribuyen a trabajar por un bien superior por arriba de las ideologías y compromisos políticos. Aún cuando es cierto que existen riesgos de simplificar la problemática de la causa, también empatan condiciones que favorecen el diálogo entre autoridades y sociedad. Por ello el “efecto Cuarón” fue bien recibido en general en la opinión pública mexicana porque fue respetuoso con la autoridad y representó una voz de varios sectores sociales.
Obviamente los activistas llaman la atención de problemas que han sido minimizados o que por diversos intereses económicos, políticos desean ser socavados. En efecto hay una diferenciación entre activistas que sólo dan voz a una causa y aquellos que vinculados a una organización si tienen un llamado a la acción.
Movilizan recursos como donaciones económicas y apoyos de empresas, universidades, agencias de relaciones públicas, etc. En países desarrollados y con filantropía “socializada y generalizada”, los eventos de recaudación de fondos que son vistos en México como cursis, actividades “fashion” o superficiales de “la socialité”, en realidad son más comunes y frecuentes de lo que se piensa. Muchos de esos eventos son esperados con gran interés por quienes participan y son vistos como una oportunidad de ayudar divirtiéndose.
Abren espacios en medios de comunicación. Eligen ser voceros y acuerdan con la organización la forma de comunicar de manera inteligente. Denuncian problemas pero enarbolan soluciones.
Dan sentido de pertenencia e identidad, se pertenece a… se colabora con… terminan integrando a personas en grupos voluntarios y organizaciones civiles. Por ello fomentan la participación voluntaria en grupos organizados. Bono y sus compañeros de U2, Bruce Springsteen, Peter Gabriel, Annie Lennox, Sting y The Police, han “llevado” a cientos o miles de simpatizantes a Amnistía Internacional o Greenpeace. Cuando Alejandro Sánz se convirtió en un miembro más de Greenpeace y visitó el ártico la membresía de la organización en España aumentó considerablemente.
Los activistas se ven inmersos en un compromiso con ellos mismos y la causa. Fomentan la congruencia de los actores participantes, tanto del famoso.
Las celebridades como activistas también cambian hábitos de alimentación o consumo. En la década de los setentas los integrantes de Boston liderados por ese genio Tom Scholz en el famoso “Don’t Look Back” se lee: “Los integrantes de Boston son vegetarianos, te invitan a modificar tus hábitos alimentarios para respetar la vida de millones de animales”. En otro disco, Third Stage, se indica: Parte de las regalías por la venta de este disco serán donadas a organizaciones ambientalistas.
Eva Longoria si quisiera tendría la opción de no hacer nada y vivir su vida de glamour en un exacerbado individualismo. Sin embargo enarbola o apoya más de 37 causas: Trabaja contra la discriminación de latinos en EEUU; es miembro del Consejo Directivo de Padres contra el Cáncer, organización que brinda a niños tratamientos contra esta pandemia; instituyó la Eva Longoria Fund; Save The Whales Again; Keep America Beautiful e incluso abrirá una oficina de su fundación en México para apoyar a la niñez.
El caso de Jennifer López es interesante. A fuerza de las presiones por su afición a usar abrigos de pieles por parte de PETA hace apenas algunos años cambió su consumo y creó en Puerto Rico la Lopez Family Foundation.
Shakira encabeza dos fundaciones Pies descalzos y Alas que ella financia pero además colabora con Hábitat para la humanidad, One Campaign. Live Earth, CHOC Children, entre otras organizaciones.
After the Fame
En México afortunadamente muchas celebridades se han subido a la dinámica de fungir como activistas y ciertamente han elegido una causa social. Muchos de ellos han recibido críticas como las que señaló Javier Tello. Pero la autenticidad de sus acciones serán sometidas al juicio del tiempo. Por señalar a algunas celebridades como activistas se tiene a:
• Emmanuel con su Fundación Hombre Naturaleza
• Rebecca de Alba y la fundación homónima
• Patricia Manterola y la Fundación Baja una Estrella
• Ana de la Reguera y la Fundación VeracruzAna
• Maná y la Fundación Selva Negra
• Rafael Márquez y la Fundación Futbol y Corazón
• Lorena Ochoa y la fundación homónima
• Paola Espinosa ha decidido crear una organización para apoyar a niños
Muchas celebridades han elegido no crear su propia institución, sino seguir apoyando causas como:
• Diego Luna ahora promueve su película César Chávez, pero antaño prestaba su imagen para que organizaciones recauden fondos a partir de las funciones de teatro en las que participa
• Gael García apoya el comercio justo
• Kate del Castillo ha prestado su imagen para apoyar la campaña latina de PETA
• Fernando de la Mora, no hay año que no ofrezca conciertos benéficos para organizaciones civiles que trabajan a favor de distintos problemas que enfrenta la infancia
• Lupita Jones brinda apoyo a la Fundación Ellen West, contra la anorexia y bulimia
• Salma Hayek, Ana Claudia Talancón, Jimena Navarrete, Jacqueline Bracamontes, Ana Serradilla, las hermanas Ha Ash, Alejandra Guzmán, son de alguna manera activistas para distintas organizaciones filantrópicas
• Jesse y Joy están colaborando con Amnistía Internacional y en el proyecto de No Violencia de la fundación de Yoko Ono.
En suma, los famosos como activistas inspiran a la gente a adoptar una causa o a trabajar por una nueva. En los cursos que dicto de voluntariado para organizaciones filantrópicas recomendamos ampliamente apoyar el trabajo de la asociación con activistas que sean celebridades, teniendo desde luego, un control para disminuir los riesgos mencionados.
Próximos eventos
Inicia Give and Gain Day 2014
Justo este viernes 9 de mayo arranca en todos los países que se han sumado a esta iniciativa la semana Internacional de Voluntario Corporativo que promueve el “Give and Gain Day 2014”. Cada vez son más empresas en diversos países que se suman a esta celebración.
AFP ofrece conferencia mensual sobre voluntariado corporativo
Este viernes 16 de mayo la Association for Fundraising Professionals ofrecerá la conferencia “Cómo vincular a mi voluntariado con el voluntariado corporativo” que tiene como objetivo conocer la dinámica de los programas de voluntariado corporativo para estar en posibilidades de construir alianzas con las actividades y necesidades de las organizaciones civiles. La conferencia se llevará a cabo en las instalaciones de la Universidad La Salle México, Unidad I Auditorio Pierre Lyonet (Entrada por Carlos B. Zetina), ubicada en Benjamín Franklin 47, Col. Hipódromo Condesa, México, D.F. C.P. 06140.Tiene costo. Para mayor Información contacte al teléfono 5293-1735 con Patricia Diaque de 9:00 a 13:00 horas.
Limpiemos nuestro México
Una edición más de esta iniciativa ciudadana de Fundación Azteca, Limpiemos nuestro México se llevará a cabo el domingo 25 de mayo. Como en años pasados se invita a los mexicanos a colaborar en actividades voluntarias para limpiar espacios públicos a través de brigadas. Los organizadores invitan a registrar la actividad en la página electrónica y sumarse a ese esfuerzo.
Es un artículo muy informativo e ilustrativo, el cual nos permite conocer diversas causas y efectos del involucramiento de las personas públicas en causas sociales. Felicidades!!!!