Manifestantes del grupo de acción climática, Just Stop Oil, que han estado protestando en la capital del Reino Unido durante las últimas dos semanas, arrojan sopa a los Girasoles de van Gogh «en respuesta a la inacción del gobierno tanto en la crisis del costo de vida como en la climática”, de acuerdo con The Guardian.
En un video —que ya circula en medios y redes sociales— se puede apreciar como las protestantes ejecutan la acción sobre la obra que se exhibe en la Galería Nacional de Londres y cuyo valor estimado es de 72.5 millones de libras esterlinas, o sea unos 80.99 millones de dólares.
¿Qué vale más el arte o la vida?: Just Stop Oil
En medio del desorden, surgieron exclamaciones por parte de los asistentes de la galería, quienes observaron la manera en la que arrojan sopa a los Girasoles de van Gogh. Tras ello, las activistas se quitaron las chaquetas para revelar las camisetas con la consigna de Just Stop Oil.
Ante los presentes, Phoebe Plummer, de 21 años, una de las manifestantes señaló: “¿Qué vale más el arte o la vida?”. Mientras que su acompañante Anna Holland, de 20 años, continuó: “¿Vale más que la comida? ¿Más que justicia? ¿Te preocupa más la protección de un cuadro o la protección de nuestro planeta y de las personas?
Después de lo ocurrido, el personal de la Galería Nacional despejó rápidamente la sala mientras arrestaban a las dos mujeres por “daño criminal y allanamiento agravado”. Y un portavoz ha confirmado que la pieza de arte no sufrió daños y que se solicitó apoyo de la policía para controlar la situación, y solo se reportaron «algunos daños menores en el marco, pero la pintura está ilesa”.
La escalada de protestas contra la inacción climática en Reino Unido
Durante las últimas dos semanas, el grupo, al que pertenecen las activistas que atentaron contra la obra de van Gogh, ha estado organizando cierres en las carreteras del centro de Londres, enfureciendo a los conductores y viajeros, pero la acción en la Galería Nacional ha sido el punto más alto.
La protesta ha provocado diversas reacciones encontradas entre quienes les preocupa que la pintura pudiese haber sido dañada y entienden la causa, y quienes ven la manifestación como un acto vandálico.
“Apoyo la causa y por lo visto se consideran protestas, con el propósito de crear conciencia y escandalizar [a la gente]. Y lo apoyo mientras no lastimen a las personas o las pongan en peligro”.
Sophie Wright, de 43 años, de Surrey.
Pero otro testigo, que se negó a dar su nombre, afirma que podía entender la causa pero que le preocupaba apuntar a “una hermosa obra de arte, que es lo mejor de la humanidad”. Y indicó que “pueden estar tratando de hacer que la gente piense en los problemas, pero todo lo que terminan haciendo es molestar».
Y el liderazgo climático de Reino Unido
De acuerdo con CNBC, el grupo ambientalista ha estado buscando desde hace tiempo que el gobierno del Reino Unido ponga fin a todos los nuevos proyectos de petróleo y gas en el país.
Y es que a principios de octubre, la Autoridad de Transición del Mar del Norte del Reino Unido, que está a cargo de maximizar las ganancias económicas del país a partir de las reservas de petróleo y gas en el Mar del Norte, comenzó a otorgar nuevas licencias para empresas que realizan exploración submarina de combustibles fósiles.
La emisión de dichos permisos se había suspendida previamente en 2020, ya que el gobierno comentó que estaba estableciendo una “verificación de compatibilidad climática”. Pero, poco después de ser elegida como primera ministra, la líder conservadora Liz Truss y su ministro de Negocios y Energía, Jacob Rees-Mogg, anunciaron que se reanudaría el proceso.
La nueva administración también levantó la prohibición del fracking, que se implementó en 2019 por la preocupación de que estaba causando terremotos. Estas medidas parecen están vinculadas a la crisis energética que se ha apoderado de Europa tras la invasión rusa de Ucrania, ya que, desde el inicio del conflicto, Rusia ha estado reduciendo el suministro de gas natural barato del que dependió el continente durante años para operar, generar electricidad y calentar hogares.
Por lo que el proceder de las autoridades británicas ha despertado una ola de críticas y preocupaciones generalizadas entre grupos ambientalistas, y políticos del opositor Partido Laborista. Sin embargo, ¿es válido que en un acto de sucumbir a la acción ambiental se recurra a medidas de impacto como el hecho de arrojar sopa a una obra de arte? Antes de contestar vale la pena señalar que los últimos informes vaticinan un planeta inhabitable de no lograr el Acuerdos de París.
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