Unas 400 ciudades del mundo, entre ellas Buenos Aires y varias urbes europeas, acordaron ayer en Bruselas recortar en más de 20% sus emisiones de gases de efecto invernadero en el marco del plan de lucha contra el cambio climático de la Unión Europea.
Para lograr los objetivos del Pacto de los Alcaldes, las ciudades firmantes contarán con el apoyo del Banco Europeo de Inversiones.