Después de que Leonardo rentara durante seis meses en el fraccionamiento Privada Esmeralda, en Zempoala, Hidalgo, él, perdió sus bienes debido a una inundación.
El departamento -practicamente nuevo- resultó muy dañado, por lo que Leonardo, quien también forma parte del Comité de Administración, buscó a la constructora responsable de dicho inmueble.
SYLMA, la constructora responsable dijo que no podía reparar el daño. Cinco meses después, una aseguradora recuperó sus muebles, pero no pasó mucho tiempo para que el fraccionamiento se volviera a inundar, por lo que acudieron con las autoridades para indagar las causas de las constantes inundaciones.
Al investigar, se descubrió que la tubería del fraccionamiento no era la adecuada para la zona. Fue así que el ciudadano Leonardo pudo demostrar que la constructora SYLMA pasó por alto una serie de dictámenes y licencias de construcción requeridos para construcciones como este fraccionamiento, para garantizar la seguridad de los habitantes.
Es por eso que se inició otra investigación, pero ahora sobre la constructora sobre quiénes eran y quiénes la representaba. Animal Político publicó el 27 de julio de 2017 que Marco Antonio Rico Moreno, subsecretario de Obras del estado de Hidalgo, tenía acciones en la constructora SYLMA, así como en otras cinco constructoras de la entidad.
De acuerdo con el mismo medio, Leonardo dijo que tras iniciar las indagatorias, Marco Antonio Rico se hizo presente en el fraccionamiento, pero al ser cuestionado por los vecinos sobre el motivo de su visita se limitó a contestar que “iba como hermano de la dueña”, más no como funcionario público en busca de una solución, para reparar los daños.
Fue así que Leonardo acudió a platicar con el subsecretario de Gobierno de Hidalgo, Juan Luis Lomeli Plascencia, a quien le dijo que su única petición era que el fraccionamiento no se volviera a inundar.
“El 10 de abril de 2017 fue el último día que me reuní con el subsecretario de Gobierno y la dueña de SYLMA, Silvia Moreno Rica, ahí ella me dijo que me iba a demandar por difamarla, cuando yo no soy el único que demanda el daño, sino todos los vecinos del fraccionamiento”.
Al no tener alguna solución, Leonardo se mudó al Estado de México, donde hace unos días fue buscado por la Policía Municipal de Hidalgo la mañana de este 11 de enero para informarle que tenían una orden de aprehensión en su contra. ¿El delito? Difamación. Por lo que lo trasladarían a Hidalgo.
Al llegar a Pachuca, lo presentaron ante el juez Tercero de Control del Poder Judicial, quien tras la primera audiencia ordenó la libertad inmediata de Leonardo y le dictó dos medidas cautelares: firma periódica y la prohibición de salir de Hidalgo, Estado de México y la Ciudad de México.
En tanto, Firma Jurídica Díaz, que asesora legalmente a SYLMA, justificó el arresto de Leonardo, contra quien se procedió legalmente para evitar que “continuara causando descrédito, deshonra y sobretodo desconfianza en la comunidad”, luego de que colocara mantas, lonas y fotografías en distintos puntos de la ciudad acusando a la constructora de no responder por los daños.