El fabricante italiano de coches deportivos Lamborghini reveló un plan de electrificación de sus vehículos de lujo con un valor de 1,500 millones de euros (1,800 millones de dólares) para tener Lamborghini eléctricos. Sumándose así a un impulso mundial para alejarse de los combustibles fósiles, a riesgo de disgustar a los aficionados.
De acuerdo con ARAB NEWS, la empresa, propiedad de Audi, filial de Volkswagen, dijo que su primer coche híbrido de producción en serie llegaría al mercado en 2023, y que todos sus modelos estarían «electrificados» a finales de 2024.
Sin embargo, un modelo de sólo batería no saldrá al mercado hasta la segunda mitad de la década, dijo Lamborghini.
Lamborghini eléctricos: un plan necesario
El plan es «necesario en el contexto de un mundo que cambia radicalmente», dijo el CEO Stephan Winkelmann en un comunicado.
«Queremos contribuir a la reducción del impacto medioambiental», añadió, y afirmó que la inversión realizada en electrificación es la mayor de la historia de la empresa.
Para 2025, la empresa debería reducir las emisiones de carbono a la mitad.
Stephan Winkelmann, CEO de Lamborghini.
La tendencia mundial hacia la electrificación ha sido más difícil para los fabricantes de los coches deportivos más rápidos que para los del mercado de masas.
¿Posible rechazo por parte de los consumidores?
Algunos han especulado con la posibilidad de que los seguidores de las marcas rechacen el par motor y la experiencia de conducción diferentes de un vehículo eléctrico en comparación con los motores de combustión tradicionales.
Siguiendo los pasos de Ferrari, Lamborghini presentó en 2019 su primera incursión en la electrificación con el superdeportivo Sian, capaz de acelerar de 0 a 62 mph (110 km/h) en menos de 2.8 segundos. El Sian, que significa «rayo» en dialecto boloñés, costó más de 3 millones de euros y sólo se construyeron unos 60.
Cabe destacar que los clientes adinerados de Lamborghini le ayudaron a registrar beneficios en 2020, a pesar de los problemas relacionados con el coronavirus que afectaron a la industria del automóvil en su conjunto.
La empresa vendió 7,430 coches el año pasado, frente a su récord de 8,205 vehículos en 2019.
Lamborghini cerró la producción durante 70 días el año pasado en plena crisis del coronavirus en Italia.