Debido a su costo como insumo, el aguacate es capaz de competir en el mercado de los biocombustibles, señaló la docente Adriana Roldán Martín, de la Universidad del Valle de México (UVM).
“Se han evaluado varios insumos para ver cuál es el más adecuado y el de menos costoso. Aquí en la UVM se nos ocurrió obtener el biodiesel a partir del aguacate porque observamos que el aguacate tiene una importante cantidad de lípidos», indicó.
En un comunicado, abundó respecto del rendimiento, que por cada kilo de pulpa macerada de aguacate se puede extraer hasta 250 mililitros de aceite, el cual se convierte al doble, es decir, medio litro de biodiesel”.
De esta manera, a partir de desechos del aguacate, estudiantes de la Ingeniería en Energía y Desarrollo Sustentable de la universidad extraen aceite, con el que elaboran un biocombustible que puede ser utilizado en todas las máquinas o motores que trabajan con diésel.
La especialista explicó que para elaborar el biocombustible, se utilizan aguacates que ya no son aptos para consumo humano, “una vez que se obtiene los lípidos de interés, se realiza la reacción de esterificación para obtener el biodiesel”.
El proceso inicia cuando al aguacate le extraen la pulpa y la semilla, posteriormente se macera, le adicionan una mezcla de disolventes, denominada mezcla de Folch, estos solventes realizan la extracción de los lípidos de interés.
Esto se deja reposar y posteriormente se filtra, de esta manera se obtienen los lípidos y con estos se realiza la reacción de esterificación, para lo cual se emplea una metanólisis básica para transesterificar los lípidos al utilizar un reactor batch.
Mediante la transesterificación se reemplaza el glicerol por un alcohol monovalente, usualmente metanol o etanol, formando moléculas más pequeñas con una viscosidad similar a la del combustible diésel derivado del petróleo.
También se produce glicerina como subproducto, misma que tiene numerosos usos en diversas industrias y reconoció que obtener y fabricar biodiesel en México no es nuevo.
Por ejemplo, el grano del sorgo, es el que se utiliza para la producción de biodiesel a nivel masivo, pero ahí sí existe un costo para fabricarlo, desde la siembra hasta la cosecha.
En el laboratorio de UVM al utilizar y aprovechar el desecho del aguacate, disminuyen los costos, por lo que resulta rentable la obtención del biodiesel, concluyó.
Fuente: La Crónica
