Un total de 135 países alcanzaron un acuerdo para frenar el contrabando de tabaco, informó en Ginebra la Organización Mundial de la Salud (OMS).
El protocolo prevé etiquetar los productos a base de tabaco, para asegurar su comercialización dentro del mercado legal y evitar que fabricantes los integren a las redes de contrabando.
Según organizaciones no gubernamentales, los fabricantes alimentan las redes de contrabando con el fin de ampliar sus mercados en los países en vías de desarrollo.
«En el marco del protocolo, las partes proponen establecer un seguimiento global y un sistema de rastreo de los productos del tabaco y llegaron a un acuerdo sobre otras medidas como licencias, responsabilidad, aplicación e intercambio de información, y asistencia jurídica mutua», dijo la Organización en un comunicado.
Este acuerdo, que debe aún ser ratificado, permitirá recaudar unos 50 mil millones de dólares anuales en concepto de ingresos fiscaleses.
En 2007, los Estados miembros del Convenio Marco de la OMS para el control del tabaco (en vigor desde 2005) comenzaron las negociaciones sobre un protocolo de lucha contra el tráfico ilegal de tabaco.
Este acuerdo debería adoptarse oficialmente en la Conferencia Ministerial de las partes del Convenio que tendrá lugar en Seúl del 12 al 17 de noviembre.
Los Estados estarán obligados a cooperar.
«El comercio ilícito de tabaco es uno de los más peligrosos en estos momentos. Suministra cigarrillos a bajo coste a los jóvenes, a la gente pobre y a todos aquellos en situación vulnerable», añadió Walton George, quien presidió la última fase de las negociaciones.
Sólo 20 países no forman parte de los Estados miembro de este Convenio, entre ellos Argentina, Estados Unidos, Indonesia, Suiza y República Checa.
Fuente: Reforma.com
Publicada: 4 de abril de 2012.