A nadie debe sorprenderle que el problema climático está a la orden del día. El tema es serio en la agenda corporativa, considerando las emisiones de muchas empresas, sobre todo en los grandes corporativos con operaciones internacionales. Los últimos eventos llevan a pensar que pronto se aplicarán medidas obligatorias y duras para hacer que muchas empresas sean más sostenibles, aunque realmente no se sabe cuándo se producirá esto.
Anticipándose a las posibles regulaciones, varios sectores ya están aplicando medidas con el objetivo de ser más sostenibles, especialmente aquellos con más impactos, como el automotriz, el energético, el textil, el alimenticio, etc. Un caso interesante es el de los juegos de azar, que están además cruzando con este paradigma, la transformación digital. Compañías como William Hill Casino están buscando mudar las operaciones físicas a lo virtual, concentrando la mayor actividad de la compañía en Internet. De esta manera, no necesitan tantos recursos y pueden incluso hacer donaciones a causas climatológicas. Esto es algo que cada vez se verá más por parte de los casinos.
Hoy en día es prácticamente imposible pensar en una empresa que ofrezca sus servicios sin tener en cuenta Internet o sin utilizar algún tipo de tecnología. Por ello, tampoco se puede pasar por alto el consumo de los grandes equipos de computación que usan muchas de las grandes compañías que cotizan en bolsa. Esto por ejemplo, ha sido un tema álgido en la industria de las criptomonedas, donde se ha señalado que la energía requerida para la minería digital causa estragos en el medio ambiente.
Influencia del 5G y el uso de la energía
El inmenso crecimiento del uso de datos impulsa la demanda de energía. Los centros de datos Edge y el 5G ayudarán a que la transferencia de datos sea más eficiente desde el punto de vista energético.
A medida que se acelera la digitalización de la sociedad, la computación en nube ha experimentado un crecimiento explosivo. Mover información requiere energía y los centros de datos representan globalmente más del uno por ciento del consumo energético mundial. La buena noticia es que se espera que la computación de borde asuma parte de las cargas de trabajo en el próximo año.
Se predice que las redes 5G de todo el mundo tendrán la capacidad de hacer un desglose local del tráfico de datos hacia y desde los centros de datos Edge. Los propios centros de datos pueden hacerse eficientes energéticamente de muchas maneras, incluyendo la utilización del exceso de calor y a través de la recolección de energía local sostenible, utilizando paneles solares y pequeños molinos de viento.
Los centros de datos Edge energéticamente eficientes y accesibles desde dispositivos móviles a través de redes 5G empezarán a aparecer, a un ritmo creciente, en 2022. Como resultado, también se ahorrará energía en las redes de distribución de electricidad y datos, ya que parte del tráfico de datos y de la electricidad se transferirá solo localmente.
Cursos en consumo eficiente para empleados
Los empleados de las empresas no están dispuestos a esperar a sus empleadores a que sean respetuosos con el clima. Quieren actuar y están impacientes por aprender cómo hacerlo. Al igual que las carreras modernas exigen que las personas se actualicen continuamente, el cambio climático exigirá que las personas, las empresas y las sociedades se adapten al aprendizaje permanente sobre sostenibilidad. La política y la reglamentación medioambientales también aumentarán la demanda de competencias laborales ecológicas en 2022.
Un número creciente de empresas implementará microtítulos y cursos verdes como parte de su «plan de estudios» para saciar la sed de conocimientos verdes entre los empleados. Las empresas que no faciliten las oportunidades de adquirir credenciales de aprendizaje verde en línea en el trabajo se arriesgan a ser percibidas como menos atractivas a los ojos de los nuevos talentos.
Por lo tanto, una oleada de microtítulos con forma ecológica inundará los sistemas de aprendizaje con el objetivo de ofrecer mayores oportunidades a los trabajadores que lo deseen. Es cuestión de tiempo que las universidades ofrezcan grados específicos para que las empresas puedan añadir a este tipo de perfiles en sus plantillas.