Las fiestas de fin de año organizadas por Heriberto Lazcano Lazcano «El Verdugo» son recordadas por los asistentes por las rifas de casas, drogas y carros último modelo, pero también porque han estado amenizadas por Alejandra Guzmán, asegura un testigo protegido.
El testigo, ex integrante de Los Zetas en Michoacán, rindió el 26 de abril un testimonio ante la juez federal Laura Serrano Alderete, en el exhorto 58/2010, en el que detalla las posadas y bacanales que ofrece Lazcano, en las que también dice que han sido contratados Los Tucanes de Tijuana.
En su testimonio, recordó las fiestas navideñas de 2006, año en que «El Verdugo» reunió en la frontera de Tamaulipas a sus principales mandos regionales y estatales para leerles una carta de Osiel Cárdenas enviada desde el Penal del Altiplano, en el Edomex, un mes antes de que dicho capo fuera extraditado a Estados Unidos.
«En esa reunión se hicieron rifas de dinero en efectivo, kilos de cocaína y mariguana, terrenos, casas y vehículos último modelo, en ese año y en esos días siguientes se llevaron otras tres reuniones similares, dos en la ciudad de Río Bravo y una en San Fernando, a la que se le llamó la posada familiar, donde podías asistir con tu familia si lo querías.
«La primera reunión fue donde Heriberto Lazcano leyó una carta de Osiel y donde se hicieron rifas, donde hubo bebida, cerveza y whiskey para las personas que quisieran; al siguiente día, fue una reunión donde se le dio de comer a todo el personal que asistió carne asada y de igual forma había bebidas alcohólicas y drogas.
«Esto se llevó a cabo en la unidad deportiva o parque conocido dentro de la organización como ‘Las Liebres’ en Río Bravo, Tamaulipas, para pasar posteriormente ese mismo día a un salón de fiestas que se ubica en la entrada hacia el pueblo de Río Bravo, viniendo de Reynosa por la calle principal y se encuentra ubicado a un lado del restaurante ‘El Sombrero’, lugar donde se concentró todo el personal que andábamos en las plazas más calientes o que estaban en guerra.
«En ese convivio mandaron traer o llegaron a la fiesta prostitutas de Monterrey, Nuevo León, y también había bebidas variadas, cerveza, tequila, entre otras y grupos musicales como los Tucanes de Tijuana y Alejandra Guzmán, entre otros eventos ese mismo día», relató.
Las posadas de Los Zetas, según investigaciones de la PGR, fueron establecidas por Lazcano desde el 2003, año de la captura de Osiel Cárdenas, para consolidar el espíritu de pertenencia a una empresa y para anunciar los cambios de operadores en sus plazas.
De acuerdo con el testigo, estas fiestas son a puerta cerrada y nadie puede abandonar el lugar antes que otro, para evitar filtraciones de información con las autoridades. Prácticamente todos se van al mismo tiempo.
En una parte de su relato, este declarante dice que en la primera de las tres fiestas de 2006 llegó entre las 17:00 y las 18:00 horas, y abandonó el sitio cinco horas más tarde, junto con todos los sicarios y delincuentes invitados por Lazcano.
El testigo referido no es el primero que habla sobre estas fiestas, ya que otro testigo colaborador que fue detenido a finales de 2008 reveló que precisamente estuvo presente en las posadas de 2006.
Este último declarante manifestó que, pese a que se trata de celebraciones mayormente masculinas y con la presencia de prostitutas, también hay posadas donde acuden las mujeres que integran la agrupación de «Las Panteras», una cuadrilla femenina que opera bajo la sombra de Los Zetas.
En la diligencia del 26 de abril, el testigo manifestó que tiene 29 años, cursó hasta la primaria, es casado y tiene una licencia de conducir del Edomex.
En esa ocasión, también declararon ante la juez Laura Serrano otros tres testigos protegidos.
Fuente: Reforma.com
Publicada: 11 de enero de 2011.
