Apenas ayer hablábamos de una marca que en su campaña comercial no mostraba respeto por los stakeholders y hoy les traemos lo opuesto. American Express hace gala de entender su mercado y el enfoque de administración basado en sus audiencias o stakeholders; el pretexto para ejecutar esta extraordinaria acción: el bicentenario de la Independencia de México.
Aprovechando todo el fervor de la fiesta, American Express decide lanzar no un anuncio de revista, no un robaplana, no una simple inserción, sino una plana completa a color en el periódico Reforma felicitando a México (que somos todos) y especialmente, recordando que ha estado con el país durante más de tres cuartas partes de su vida independiente.
Si American Express es el padre del marketing con causa, aquí nuevamente ha vueto a mostrar su entendimiento del tema, al enlazarse con sus audiencias aprovechando una ventana de oportunidad y generando buen goodwill. En síntesis, tremendo ROI en su relación costo-beneficio… aunque éste no sea tangible.
La acción es un claro reflejo de una de las declaraciones más contundentes de su sitio web: Estamos seguros de que las cualidades de confianza, integridad, seguridad, calidad y servicio al cliente, que han hecho de la empresa American Express una de las marcas más reconocidas en el mundo, no sólo aseguran su lugar entre las grandes compañías del pasado: también garantizan que American Express continuará siendo una de las compañías más dinámicas y con amplio crecimiento en este nuevo milenio.
De la misma manera refuerza uno de los valores corporativos expresados: «Ser buenos ciudadanos en la comunidad donde vivimos y trabajamos.»
Esto es entender el mercado y la gestión de stakeholders.