Por Antonio Vives, columna original en el sitio Cumpetere
El prestigioso periódico de negocios, el Wall Street Journal, publico un artículo de opinión el 12 de febrero, escrito por el CEO de Roivan Sciences, Vivek Ramaswamy, que ha dado mucho que hablar: The ‘Stakeholders’ vs. the People (Los stakeholders versus el pueblo)(sólo disponible por subscripción, pero, irresponsablemente, lo incluimos al final).
El artículo cuestiona el movimiento hacia la ampliación del propósito de la empresa más allá de la maximización de beneficios para sus accionistas hacia la inclusión de los intereses de otros grupos de stakeholders, en respuesta al interés que se despertado recientemente sobre el propósito de la empresa (ver Propósito, propósito, y más propósito: ¿La solución a los problemas de responsabilidad?) representado por la Declaración del Business Roundtable, suscrita por 181 CEO de las mayores empresa de EE.UU. (ver El propósito de la empresa responsable: ¿Punto de inflexión? ¿Se consolida?), de la presentación del Manifiesto Davos2020, sobre el Capitalismo de los Stakeholders, en la cumbre de las élites en Davos, Suiza, en enero del 2020 (ver Capitalismo de los stakeholders” surge de Davos: ¿en serio?) y de últimas tres las cartas abiertas a sus colegas por parte de Larry Fink el CEO del fondo de inversiones más grande del planeta (Mucho ruido, pocas nueces: Activismo de fondos de inversión).
Examen: ¿Cuál es el papel/responsabilidad de la empresa ante la sociedad?
Aprovechamos este controversial artículo para proponerle al lector un examen sobre el papel/responsabilidad de la empresa ante la sociedad, y de paso ilustrar como leer un artículo con sentido crítico. Para ello, reproducimos partes claves del artículo sobre las cuales le formulamos las preguntas al lector. Al final del artículo ofrecemos nuestras opiniones, pero no deben ser leídas hasta que no haya ensayado sus respuestas.
Dice: “El capitalismo de los stakeholders exige que las empresas y sus líderes jueguen un papel fundamental en la determinación de los valores centrales de la sociedad. Pero para que las empresas persigan intereses sociales en adición a los intereses de los accionistas, las empresas primero deben definir cuáles deben ser estos intereses de la sociedad. Esto no es un juicio empresarial, es un juicio moral.”
Pregunta #1: ¿Determinan las empresas los valores centrales de la sociedad? ¿Es necesario que las empresas definan cuales deben ser los intereses de la sociedad para poder jugar su papel?
Dice: “No quiero que los capitalistas jueguen un mayor papel en la definición e implementación de los valores sociales y políticos del país. Creo que ello debe ser determinado por la ciudadanía…..Los funcionarios elegidos democráticamente, no los CEO o los directores de fondos de inversiones son lo que deben liderar el debate sobre los valores que definen al país.”
Pregunta #2: ¿Corresponde a los gobernantes liderar el debate sobre los valores que definen al país o corresponde a la sociedad elegir gobernantes que reflejen los valores de esa sociedad?
Dice: “Pero estos líderes empresariales no tienen capacidades especiales para decidir si un salario mínimo para los trabajadores en el país es más importante que el pleno empleo o si la minimización de la huella de carbono de la sociedad es más importante que la subida de precios de bienes de consumo.”(El autor supone que son mutuamente excluyentes, que el salario minino impide el pleno empleo y que la reducción de emisiones conlleva subidas de precios de los productos).
Pregunta #3: ¿Se requiere que las empresas tomen decisiones de priorización relativa de políticas económicas para definir su papel en la sociedad? ¿o debe la empresa adaptar su papel a lo que percibe son las expectativas y necesidades de la sociedad a las que puede contribuir?
Pregunta #4: ¿Es parte del papel/responsabilidad de las empresas, a nivel de colectivo, el buscar influenciar políticas nacionales y supranacionales, en lo que creen son las expectativas de la sociedad, o debe limitarse a su ámbito directo de acción?
PIENSA EN TU OPINIÓN ANTES DE SEGUIR
Mis opiniones
En realidad, no se trata de aprobar o reprobar el examen. No es tema de ciencias naturales, es de ciencias sociales y en ello puede haber diversidad de puntos de vista. Lo que si podemos alegar es que hay puntos de vista más internamente consistentes, más cerca del consenso. De allí que prefiero llamarlas “mis opiniones” y no “las respuestas”.
Pregunta #1: ¿Es necesario que las empresas definan cuales deben ser los intereses de la sociedad para poder jugar su papel?
No, todo lo contrario, las empresas deben considerar cuales son los intereses que la propia sociedad ha definido. No compete a las empresas, no es parte de su papel en la sociedad el definir cuales son los intereses de la sociedad, ni cuales deben ser sus valores. Es la sociedad la que determina sus valores, a través de su evolución histórica, de sus circunstancias, de sus instituciones, de sus líderes, etc… Compete a las empresas apoyar esos intereses en la medida que ello es compatible con sus propios valores e intereses. La empresa debe llevar a cabo sus actuaciones en función de esos valores de la sociedad.
Pregunta #2: ¿Corresponde a los gobernantes liderar el debate sobre los valores que definen al país o corresponde a la sociedad elegir gobernantes que reflejen los valores de esa sociedad?
No, no compete a los gobernantes liderar el debate sobre los valores que definen al país, salvo que la sociedad sea relativamente subdesarrollada. Es la sociedad la que elige a los gobernantes, o debería elegirlos, que sean compatibles con sus valores. Claro está que “la sociedad” no es homogénea y hay diversidad de opiniones y variantes sobre sus valores, aunque debería haber un conjunto de valores nucleares, comunes. Es cierto que los gobernantes (supuestamente) representan los intereses de la sociedad, pero no es universalmente cierto que son más competentes que los líderes empresariales para estos propósitos. Ambos tienen intereses que pueden conspirar contra la promoción de los valores de la sociedad, unos en la perpetuación en sus cargos y beneficios personales, otros en la obtención de beneficios monetarios.
Pregunta#3: ¿Se requiere que las empresas tomen decisiones de priorización relativa de políticas económicas para definir su papel en la sociedad? ¿o debe la empresa adaptar su papel a lo que percibe son las expectativas y necesidades de la sociedad a las que puede contribuir?
No, la empresa no tiene entre su papel/responsabilidad ante la sociedad el elegir entre objetivos conflictivos a nivel agregado de la economía. En todo caso le corresponde promover aquellos que sean compatibles con los suyos, en función del papel que quiere jugar. No tiene porque abogar por un salario mínimo para toda la economía, pero puede querer hacerlo en su empresa. También pueden querer reducir su huella de carbono, aunque ello conlleve a un mayor costo de sus productos, pero que también puede llevar a una mayor aceptación de ellos por parte de sus clientes.
Pregunta #4: ¿Es parte del papel/responsabilidad de las empresas, a nivel de colectivo, el buscar influenciar políticas nacionales y supranacionales, en lo que creen son las expectativas de la sociedad, o debe limitarse a su ámbito directo de acción?
Las empresas con gran poder económico pueden querer influenciar las políticas nacionales y supranacionales en temas globales como el cambio climático, la desigualdad, la inmigración, etc., en función de sus valores y de lo que creen son las necesidades de la sociedad, especialmente cuando los dogmatismos políticos conspiran contra ello. Su acción puede ser más afectiva en su ámbito de acción, pero ello no obsta para que quieran actuar a nivel más amplio, sobre todo actuando en conjunto con otras empresas de valores similares (ver Responsabilidad política de la empresa responsable).
En resumen
Es opinión del suscrito que el autor del artículo no solo es dogmático, sino que no tiene las ideas claras sobre el papel de la empresa en la sociedad. Es de la opinión que la empresa debe dedicarse exclusivamente a hacer negocios e ignorar sus impactos sobre la sociedad y en especial cree que contribuir al bienestar de la sociedad está fuera de su ámbito de acción. El capitalismo no es solo un conjunto de empresas, es todo un ecosistema y parece confundir el papel de la empresa en su ámbito de actuación con políticas a nivel de la economía como un todo. No parece ser un experto sobre el tema del que escribe. Pero se lo publica el Wall Street Journal.
Da miedo pensar que así piensa un CEO (34 años de edad) de una empresa farmacéutica que desarrolla nuevos medicamentos. Por cierto, la casa matriz tiene sede en un paraíso fiscal, Bermuda.