El gobierno chino aprobó nuevas estrategias para combatir la contaminación ambiental, uno de los mayores desafíos que enfrenta la nación asiática.
«En una reunión presidida por el primer ministro Li Keqiang, el Consejo de Estado aprobó medidas para lograr duros objetivos», informó el consejo.
Entre ellas figura la meta de reducir las emisiones contaminantes en un 30 por ciento en industrias de elevada contaminación para fines del 2017.
La población china está cada vez más indignada con la contaminación del aire, el agua y la tierra, como consecuencia de impulsar una política de desarrollo a toda costa.
El público prácticamente no tiene voz en los proyectos industriales y con frecuencia protesta contra las fábricas o plantas petroquímicas por temor a que éstas puedan dañar su salud.
En febrero, el Ministerio del Medio Ambiente anunció que seis industrias altamente contaminantes, incluyendo la siderúrgica, petroquímica y la del cemento, así como la de extracción de mineral de hierro, tendrán que cumplir gradualmente las normas de emisión especiales.
Durante las épocas de gran contaminación, autoridades locales deberían tomar medidas como limitar el tránsito vehicular o adoptar topes emisores a las industrias contaminantes.
Fuente: Reforma
