A las empresas españolas no les está yendo bien en Argentina. A la pelea entre el Gobierno de Cristina Fernández y Repsol YPF por la presunta falta de inversión de la petrolera, el lunes se sumó el apagón de más de cinco horas que sufrieron los 16 millones de usuarios de Movistar, la empresa de telefonía móvil de Telefónica. El Gobierno argentino advirtió ayer de que impondrá las “sanciones máximas” contra la empresa, una de las tres principales operadoras de móviles de Argentina.
El lunes era festivo en Argentina, pero los usuarios, de todos modos, hicieron sentir su queja en las redes sociales y en los medios de comunicación. También quedaron afectados los usuarios de otras compañías de telefonía móvil y los de fija que querían llamar a los de Movistar.
“Esto no se agota en la imposición de una sanción”, contó el interventor de la Comisión Nacional de Comunicaciones, Ceferino Namuncurá. “El ministro [de Planificación, Julio de Vido] nos ha pedido que estudiemos profundamente el tema para establecer el resarcimiento a los usuarios”, añadió Namuncurá. De Vido es quien también tiene a su cargo la relación con Repsol. Mientras, una asociación de consumidores reclama que Movistar pague 84 euros a cada cliente. La Comisión de Comunicaciones declaró el lunes que el problema en el servicio de Movistar se debía “a una falla en el software de Telefónica, en particular del sistema de señalización, que es el que permite realizar llamadas, afectando a la telefonía móvil y en algunos casos también a la fija”. Después de reanudado el servicio, Movistar anunció que se encontraba analizando “las causas que provocaron este incidente”.
Namuncurá lamentó que “empresas con alta rentabilidad” que deberían “estar prestando un servicio de excelencia” hayan provocado semejante interrupción de las comunicaciones. La “rentabilidad” que perciben las compañías “permite que se hagan las inversiones que el Estado demanda tanto en la telefonía móvil como fija”, añadió el interventor.
La Comisión de Comunicaciones había declarado el lunes que el problema en el servicio de Movistar se debía «a una falla en el software de Telefónica, en particular del sistema de señalización, que es el que permite realizar llamadas, afectando la telefonía móvil y en algunos casos también la fija». Después de reanudado el servicio, Movistar anunció que se encontraba analizando «las causas que provocaron este incidente». La empresa española dispuso ayer que dará a sus clientes con factura un reconocimiento del cargo proporcional a un día completo en su próximo abono. Además les extenderá por 48 horas la vigencia del crédito a aquellos usuarios que tuvieran recargas con vencimiento el lunes pasado. Por último, todos los clientes podrán enviar SMS gratis durante los cuatro días de Semana Santa a toda Argentina. Movistar pidió disculpas por este «extraordinario incidente, por primera vez en 22 años de operación» en este país.
Los precios de la telefonía móvil se encuentran desregulados en Argentina. Este negocio y el de banda ancha han permitido que Telefónica y Telecom Argentina (controlada por Telecom Italia) ganaran dinero en los últimos años, pese a la congelación de tarifas del servicio fijo desde la crisis local de 2002. En el mercado de móviles, con 50 millones de aparatos para 40 millones de habitantes, también opera Claro, la marca del conglomerado que pertenece al multimillonario mexicano Carlos Slim. Justo el pasado domingo había comenzado a regir la norma por la que los clientes pueden cambiar de compañía sin perder el número, por lo que las empresas han preparado campañas para quitarles usuarios a sus competidoras. Movistar no ha comenzado con el pie derecho.
Fuente: ElPais.com
Por: Alejandro Rebossi
Publicada: 4 de abril de 2012.
