Australia ha dado un paso de gigante en la lucha contra el cambio climático. El Senado ha aprobado un impuesto para gravar la emisiones de dióxido de carbono a partir de mediados de 2012.
La adopción de esto impuesto se produce a pocas semanas de que arranque una nueva cumbre sobre cambio climático, en Durban, Sudáfrica.
La reforma, con la que se quiere incentivar las energías renovables, supone una gran victoria para la primera ministra australiana, en dificultades políticas: “Esto llega después de un cuarto de siglo de avisos de los científicos, 37 investigaciones parlamentarias y años de agrios debates y divisiones. Hoy, nuestro país ya tiene su propia ley” decía Julia Gillard.
Unas 500 empresas se verán afectadas por la nueva legislación. A partir del 1 de julio de 2012 deberán pagar el equivalente a 17,3 euros por tonela de CO2. El impuesto, que excluye al sector agrícola, aumentará gradualmente hasta 2015.
Australia es el país desarrollado que más dióxido de carbono emite en términos per cápita.
Fuente: Es.euronews.net
Publicada: 8 de noviembre de 2011.