El 2020 es un año que busca luchar a favor del cambio climático: empresas, gobiernos, asociaciones civiles e inversionistas se están comprometiendo cada vez más.
Hace unas semanas, Goldman Sachs, uno de los grupos de banca de inversión de valores más grande del mundo, anunció que invertirá 750 mil millones de dólares en los próximos 10 años para financiar y asesorar a empresas que buscan implementar prácticas sostenibles en áreas como energía limpia, educación y medicina.
Avanza la inversión sustentable
El grupo también hará revisiones a sus políticas para excluir de sus inversiones a proyectos que impacten el ambiente, como las perforaciones petroleras en el Ártico, en el Polo Norte o en minas de carbón.
De acuerdo con David M. Solomon, director general del banco de inversión estadounidense, «no sólo hay una necesidad urgente de actuar, sino un poderoso caso de negocios e inversión para hacerlo».
La rentabilidad siempre importará. Debemos generar fuertes retornos sobre el capital invertido de los ahorros para la jubilación. Los mercados pueden y harán mucho para abordar el cambio climático, pero dada la magnitud y la urgencia de este desafío, eso no será suficiente.
David M. Solomon, director general del banco de inversión estadounidense.
Las finanzas sostenibles ya no están al margen de los negocios como tradicionalmente se han guiado las empresas, tratándolas como un problema periférico. Ya no tenemos el lujo de esa perspectiva limitada.
Datos de El Economista, afirman que el gestor de activos más grande del mundo con 7,000 millones de dólares bajo administración, también anunció a principios de enero, cambios en sus políticas de inversión con una visión más sostenible. Su propósito es aumentar 10 veces sus activos sostenibles de 90,000 millones de dólares a 1 billón de dólares en los siguientes 10 años, y también reducir su exposición en empresas que generan más de una cuarta parte de sus ganancias en el uso de carbón.
Las empresas, los inversionistas y los gobiernos deben prepararse para una reasignación significativa de capital.
Larry Fink, CEO de BlackRock.
WATCH: What role will big oil and utility companies play in the transition to a low-carbon economy? $GS Research explains: https://t.co/scHWiY8hXO pic.twitter.com/I5JdNmeEb8
— Goldman Sachs (@GoldmanSachs) January 26, 2020
Avance en temas ambientales de México
Ante los riesgos del cambio climático y las consecuencias que se presentan, los inversionistas afirmaron que ahora demandarán más información a las empresas relacionadas con sus acciones en materia ambiental, social y de gobierno corporativo.
Es evidente cómo los inversionistas comenzarán a cuestionar a las empresas sus prácticas sobre el valor que estén generando a largo plazo en temas ambientales, sociales y de gobierno corporativo.
Marimar Torreblanca, socia de la división de ASG en Miranda Partners.
En entrevista con El Economista, Marimar Torreblanca, socia de la división de ASG en Miranda Partners, afirmó que México todavía está “rezagado” en el tema de inversiones sostenibles, pero sin duda, tiene todo lo que se necesita para posicionarse como un país que impulsa las inversiones ASG.
“Vamos atrasados, no todas las empresas tienen identificados los estudios para manejar esos factores de ASG y hay compañías que no le han dado tanta relevancia”, comentó.
En el caso de México, refirió, los inversionistas ya empiezan a integrar en sus procesos de análisis e inversión cuestionarios sobre factores ambientales, sociales y de gobierno corporativo.
While climate change is a global issue, cities are finding themselves on the frontlines of climate adaptation. As discussions at #WEF20 progress, learn more from our Global Markets Institute: https://t.co/ZtRyJ2OaQV #GSsustainability pic.twitter.com/kk4Ds3qJKX
— Goldman Sachs (@GoldmanSachs) January 24, 2020
La especialista, que por más de 15 años se ha dedicado al análisis financiero, alertó que los factores ASG se han vuelto relevantes para analizar el riesgo de las empresas por el impacto real para sus negocios.
Respecto al gobierno corporativo, Torreblanca destacó que los inversionistas sin duda le ponen un descuento a las empresas que no tienen una buena estructura, y es un tema más familiar para la comunidad financiera.
Una empresa que no está bien alineada con sus inversionistas puede tomar decisiones que no necesariamente son las mejores, que hace sentido para la empresa en este momento, pero no para los inversionistas a largo plazo.
Marimar Torreblanca también señala que un análisis realizado por la Universidad de Oxford, reveló que 88% de los estudios muestra que las empresas con criterios sociales y ambientales tuvieron un mejor desempeño operativo.