Avon permite a mujeres africanas salir de la pobreza

Es común que las marcas afirmen cambiar la vida de sus empleados y/o consumidores, pero no es común que estudios independientes confirmen que el trabajo de una empresa es una influencia positiva en la población femenina de un país. Eso es precisamente lo que afirma un estudio de la Escuela de Negocios Saïd , de la Universidad de Oxford, sobre la presencia de Avon en Sudáfrica.

El estudio se llevó a cabo aplicando encuestas y entrevistas a 300 representantes de ventas Avon de raza negra y a 77 consumidoras, además de incluir entrevistas con administrativos de la empresa. Los resultados demuestran que Avon sí cumple su promesa de ser LA empresa para mujeres: las vendedoras Avon ganan lo suficiente para cubrir los gastos de su hogar, incluyendo servicios de salud.

La profesora Linda Scott , una de las investigadoras, admite que la cantidad que estas mujeres ganan es pequeña si se le compara con los sueldos europeos, pero coloca a las representantes Avon entre las mujeres de raza negra mejor pagadas de su comunidad, y las pone en el mismo nivel de sueldo que un hombre. Las ganancias de aquellas que venden productos Avon como trabajo de tiempo completo y lo han hecho por 16 meses las colocan entre el 10% de mujeres de raza negra auto empleadas en el país con mejores ingresos.

Pero no solo se trata de beneficios económicos. Trabajar para Avon le da a estas mujeres un entrenamiento que pueden usar en futuros empleos, y el 88% afirmó que su experiencia como representantes de ventas les ha dado una mayor auto confianza. También mencionaron que son un ejemplo para sus hijos y sienten que pueden realizar sus sueños.

De esta forma, se demuestra que los países en vías de desarrollo son un área de oportunidad para las empresas que puedan ofrecer flexibilidad, entrenamiento y un buen producto a mujeres trabajadoras.