Convencer a la gente de luchar por el planeta no es tarea fácil. Primero resulta que queremos ver cuál es el beneficio personal, después que las campañas no son lo suficientemente masculinas y ahora un nuevo estudio revela que saber de las ventajas que da compartir un auto disminuye las probabilidades de que alguien recicle.
La investigación de la Universidad de Cardiff, en el Reino Unido, fue realizada en un ambiente controlado y sus resultados no son concluyentes. Pero es interesante que la mitad de los sujetos que recibieron información sobre los beneficios ambientales y personales de compartir vehículo no tiraron su basura en el contenedor de reciclaje, mientras que el 83% de los que solo supieron sobre los beneficios ambientales sí reciclaron.
Aparentemente, no se trata de un fenómeno que se de solamente en relación con lo verde: a las personas nos da trabajo pensar en nosotros mismos al mismo tiempo que actuamos para un propósito mayor, de forma que nuestro cerebro elige alternativamente entre ser egoísta o generoso, aún en situaciones cuando sería posible hacer ambas cosas.
¿Qué significa esto para el green marketing y para nuestro planeta? ¿Es mejor proponer acciones que tengan beneficios concretos o concentrarnos en salvar al planeta?