Actualmente las pequeñas y medianas empresas (pymes) son una de las bases más importantes de la economía mexicana; tan sólo este segmento aporta el 52% del Producto Interno Bruto (PIB) y genera el 72% del empleo en el país.
Dentro de las pymes, las franquicias se han convertido en uno de los modelos comerciales con mayor difusión y éxito a nivel nacional debido a las ventajas que tiene el emprendedor al iniciar un negocio de este tipo, como la reducción de riesgos e incertidumbre y el acceso a la experiencia, tecnología y know-how del franquiciante.
Es importante mencionar que un inversionista interesado en adquirir una franquicia debe considerar que actualmente existen 1,500 marcas de franquicias disponibles en el país y su éxito dependerá en parte de su capacidad de adaptación y réplica frente a las necesidades del mercado nacional.
Ante el gran potencial de las pymes mexicanas y la importancia de que existan opciones de inversión que generen retornos atractivos, surge en 2015 Bambú Inversiones, una empresa mexicana cuyos esquemas de inversión fueron desarrollados con ayuda de consejeros de México, Estados Unidos y España expertos en inversiones de capital privado, franquicias, propiedad industrial, investigación de mercados y análisis de proyectos.
De acuerdo con su Director General, Andrés Fausto, Bambú Inversiones está en una constante búsqueda de proyectos con alto potencial de expansión para invertir en ellos y convertirlos en franquicias exitosas. Los principales objetivos de estas inversiones son ayudar a generar ingresos pasivos a inversionistas, apoyar a los emprendedores mexicanos a crecer sus negocios y crear empleos.
Sus esquemas de inversión parten del modelo tradicional del capital emprendedor, también llamado venture capital. Sin embargo, se adaptó al ramo de franquicias, así como al marco legal y al entorno económico de México. Como resultado se obtuvo un esquema más accesible y redituable para inversionistas y empresas por igual.
Esta compañía destaca por la manera en que conforman los proyectos. En venture capital tradicional, primero se consiguen los inversionistas y posteriormente se buscan proyectos en qué invertir, mientras que en Bambú Inversiones primero se obtienen los proyectos y luego se buscan a los inversionistas, otorgándole a éstos el poder absoluto de elegir los proyectos en que desean participar.
Bambú Inversiones se rige bajo tres esquemas: desarrollo y expansión, difusión y expansión y finalmente, adquisición y operación. En el esquema de desarrollo y expansión se seleccionan a pymes exitosas que quieran desarrollar su modelo de franquicia y tengan el potencial de expandirse rápidamente.
En el esquema de difusión y expansión se buscan empresas que ya cuentan con algún modelo de franquicia para ayudarles a mejorarlo y difundirlo para encontrar nuevos franquiciatarios. Por último, en el esquema de adquisición y operación se compran y operan franquicias de empresas en las que Bambú Inversiones ha invertido, ayudándolas a crecer de manera rápida y estratégica.
Bambú Inversiones está en una constante búsqueda de nuevos proyectos para todos sus esquemas y México cuenta con un gran número emprendedores con valiosas ideas, las cuales con el apoyo necesario pueden materializarse y convertirse en empresas exitosas con presencia nacional e incluso internacional
Comunicado de Prensa.
