La contratación de estudiantes o recién egresados dentro de las empresas, como becarios no remunerados, es una práctica común que ha despertado polémica en los últimos años.
Las compañías que la llevan a cabo, aseguran que se trata de una forma de impulsar en talento y ayudar a que los nuevos profesionales adquieran la experiencia que necesitan para integrarse al mercado laboral. No obstante, este puede ser también un camino para reducir costos, explotando la inexperiencia de los nuevos talentos.
Este debate que ha estado vivo por varios años, ha cobrado fuerza recientemente, cuando Jane Slater de NFL Network compartió la apertura de una pasantía para becarios no remunerados de periodismo de transmisión: configuración, grabación y edición de llamadas de Zoom con prospectos de la NFL y lo calificó como una «gran experiencia».
La noticia en cuestión fue publicada por INC; y aunque se trata de una práctica que no es nueva, esta vez la pasantía despertó indignación y polémica. Después de todo, el trabajo que los jóvenes realizan a lo largo de sus años de estudio para adquirir conocimientos, merece al menos un mayor reconocimiento que la expectativa de prestar servicios gratuitos a grandes compañías.
La oferta de la NFL
Como sucede con muchas de las ofertas a las que los nuevos talentos se enfrentan hoy en día, la convocatoria de la NFL corresponde a una pasantía no remunerada. Hecho que provocó un acalorado debate sobre la inequidad de este tipo de programas y lo que representa para los jóvenes trabajar, no solo de forma gratuita, sino a menudo, haciendo su propia inversión económica para cubrir necesidades de transporte y otros gastos derivados de su labor.
Usuarios de redes sociales y líderes de opinión se manifestaron en contra de esta tipo de programas que, más que impulsar el talento joven, con frecuencia parecen aprovecharse de él.
Las pasantías no remuneradas son solo explotación, incluso cuando estabas en la universidad y eras demasiado joven para entender eso.
Periodista científico independiente.
Otra respuesta afirmó:
Las pasantías no remuneradas representan una ilusión de oportunidad, pero en realidad beneficia a las empresas con mano de obra gratuita de personas que ya están económicamente seguras, brindándoles experiencia y conexiones que la gente pobre no puede permitirse obtener.
Opción para pequeños negocios y OSC
La postura anterior contrasta fuertemente con quienes opinan que las pasantías no remuneradas, a cambio de experiencia profesional son un buen camino para las organizaciones sin fines de lucro o los pequeños negocios que se esfuerzan para mantenerse a flote. De esa forma, los jóvenes talentos pueden obtener formación, experiencia, conexiones y relaciones, al tiempo que contribuyen a mantener viva a la organización.
Si bien en estas ofertas no hay salario, sí hay una oportunidad para que un pasante agregue habilidades y logros reales a un currículum vitae o CV.
El hecho es que sí puede permitirse realizar una pasantía no remunerada. Para algunos, no importa cuán grandes sean las recompensas no monetarias, sin embargo, hay que tomar en cuenta que si las recompensas, aún en especie, no superan el costo del tiempo invertido, hacer una pasantía no remunerada no tiene sentido.
Y en última instancia, justo o injusto es una decisión individual que se reduce a una ecuación simple: la proporción entre lo que das y lo que recibes.