Dos siglos de pobreza y desigualdad
Las condiciones de pobreza y desigualdad en el México actual son similares a las de hace 200 años, lo que aunado a la inseguridad pública y la violencia en el país, con tres décadas de crecimiento económico anual promedio de sólo 2.1 por ciento, hacen que el Bicentenario no sea tiempo de fiestas, sino de reflexión y compromisos.
Gerardo Gutiérrez Candiani, presidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), señaló que 200 años después del inicio de la Independencia, 50 millones de mexicanos viven en pobreza y casi 20 millones en pobreza extrema, con lo que continuamos siendo una de las naciones con mayor desigualdad en el mundo.
Antes de ese movimiento, cerca de tres millones y medio de indígenas -60 por ciento de la población- estaban en la pobreza y privados de libertades y derechos políticos.
Esas condiciones son un llamado de atención urgente, ya que la circunstancias de hoy son las mismas de ayer.
Reiteró el llamado que hizo su gremio la semana pasada a las diferentes fuerzas políticas a acabar con la parálisis de acuerdos y decisiones a través de un pacto nacional, como los que le han dado proyección a países como España y Chile.
En su mensaje semanal: «El Bicentenario: antes que celebrar, responsabilizarse», destacó que los ideales por los que lucharon y sacrificaron su vida muchos mexicanos en el pasado, no se han convertido en realidades concretas para toda la población.
Confrontación
El dirigente del sindicato patronal lamentó que el debate público sigue inmerso en el cortoplacismo y la confrontación partidista.
Los mismos retrasos en las celebraciones y obras conmemorativas son un reflejo de la falta de coordinación, corresponsabilidad y voluntad para alcanzar acuerdos que priva en la política nacional.
En el pasado, ante la falta de visión y rumbo claro, el entorno social se caracterizaba por la desunión, el descontento entre la población y la incertidumbre.
Y como ahora, la mayor parte de la gente sentía que sus autoridades y representantes no estaban en sintonía con sus intereses y necesidades.
Al igual que en pleno siglo XXI, hace 200 años las diferencias pesaban más que las coincidencias, subrayó Gutiérrez Candiani.
El gran desafío para los mexicanos de 1810 y de 1910, es el mismo que en 2010: generar y comprometerse con un proyecto de país viable, con visión de largo plazo, en el que todos puedan alinearse en torno a las coincidencias y procesar de manera pacífica y efectiva las diferencias.
Pero aclaró que las coincidencias entre partidos políticos, gobernadores, presidentes municipales y el mismo gobierno federal, no se van a dar solas. Hay que construirlas desde la ciudadanía.
Dijo que su gremio no espera a que surjan nuevos héroes o condiciones ideales para que los políticos lleguen a acuerdos, pero hay que tener presente que todos «tenemos que hacer historia, y pasar de ser espectadores a protagonistas».
No hay otra mejor forma de honrar los movimientos sociales que le han dado sentido y cohesión a México, que llevando a los hechos los ideales que los motivaron: unión, soberanía, libertad, democracia, justicia, equidad y prosperidad.
Fuente: El Financiero; Economía, p. 10
Autor: Isabel Becerril
Publicada: 14 de Septiembre 2010
Hola: Buen mensaje. Se celebra el inicio de….. ,pero,…. ¿ que se ha logrado ?… Como lo anotan , NADA DE FESTEJOS . Pero… estas personas ECHARON LA CASA POR LA VENTANA.. Han gastado como RICOS,(bueno, …ellos SI TIENEN RIQUEZA).. pero hay muchísima pobreza é injudticia. Att. Saludos Ing. E. lópez G