British Petroleum (BP) acordó pagar una multa de 50 millones 600 mil dólares por una explosión en 2005 en su refinería de Texas City, y aceptará una supervisión de seguridad “sin precedentes” en esa planta, reveló el gobierno de Estados Unidos.
La multa es en el marco de un acuerdo de BP con las autoridades, según el cual la petrolera británica se comprometió a destinar otros 500 millones de dólares para mejoras en materia de seguridad.
La sanción se debe a los reiterados fracasos de BP para lograr los estándares de seguridad tanto antes como después de la explosión de 2005 en su refinería de Texas, que dejó un saldo de 15 muertos y 170 heridos.
La Administración de Salud y Seguridad Laboral, dependiente del Departamento del Trabajo, le impuso a BP multas por 87 millones 400 mil dólares en octubre del año pasado por diversas violaciones en esa refinería.
BP enfrenta además una demanda federal por diez mil millones de dólares que corresponden a la contaminación que generó en el periodo de abril-mayo de este año en la refinería de Texas.
Por otra parte, una vez que ha sido sellado el pozo de BP en el Golfo de México y mientras la empresa y el gobierno federal evalúan si se necesita el tapón final, funcionarios locales temen que Washington está retirando su atención de lo que sigue siendo una enorme crisis.
Los trabajadores están perforando el tramo final de un pozo de alivio para tapar definitivamente el pozo vertiéndole más cemento, después de que el mal tiempo demoró los trabajos.
El anuncio de la cercanía de una depresión tropical había causado la interrupción de los trabajos y se preveía que la suspensión durara cuatro días, debido a temores por vientos fuertes y mar agitado. No obstante, la perturbación se disipó antes de lo previsto.
Fuente: El Financiero; Internacional, p. 22
Publicada: 13 de agosto 2010
