España ya es la oveja negra en materia de contaminación atmosférica a ojos de Bruselas. Así lo advirtió ayer un informe de la Agencia Europea de Medio Ambiente tras constatar que fue el único país de toda la UE que excedió los límites legales en la emisión de hasta tres de los cuatro contaminantes que controla la norma comunitaria. Otros 11 países incumplieron la ley al emitir más contaminantes de los permitidos pero ninguno con tantos frentes abiertos como España, destaca la agencia, según datos de 2010, los últimos disponibles. Es la primera vez que Bruselas compara los datos de contaminación recabados en los distintos países conforme a lo exigido en la ley comunitaria.
El suspenso español ya se conocía por los datos que el Gobierno y las comunidades avanzaron el año pasado -Barcelona y, especialmente Madrid, son dos de las ciudades con más contaminación atmosférica del continente debido a la densidad del tráfico metropolitano-, pero la UE detalla ahora que los datos del país se hallan entre los peores de la zona.
El país, de hecho, solo aprobó en los niveles de emisión de dióxido de azufre. El suspenso se concretó en óxidos de nitrogeno (emitió 53.000 toneladas más de las permitidas por la ley), compuestos orgánicos volátiles (sobrepasó el nivel legal en 10.300 toneladas) y amoniaco en el aire (15.400 toneladas de más). «Se trata de contaminantes que contribuyen a causar problemas de salud y pueden generar pérdidas económicas y daños medioambientales», advirtió la directora ejecutiva de la agencia, Jacqueline McGlade.
El incumplimiento supone trabajo añadido para los Gobiernos afectados, ya que la UE contempla ir endureciendo la ley los próximos años y ampliar el número de contaminantes controlados antes de 2020 para reducir el coste sanitario que implica la excesiva polución: causa unas 300.000 muertes en la UE cada año -cerca de 3.500 solo en el área barcelonesa-. «Los países que hayan suspendido deberán hacer más esfuerzos» en el futuro, advirtió McGlade.
Esta exigencia coincide con la llegada del PP al Gobierno. El nuevo ministro responsable de Medio Ambiente, Miguel Arias Cañete, ya ha adelantado que modificará a la baja la Ley de Calidad del Aire para hacerla «más realista». La norma vigente, por su parte, tampoco contempla reducir o restringir el tráfico en las zonas urbanas. Esta es una vieja reivindicación de los ecologistas y una de las principales políticas que están aplicando en los últimos años otros países de la UE. Bruselas estima que el tráfico rodado genera alrededor del 40% del total de emisiones contaminantes.
A lo largo de este año, el Tribunal de Justicia de la UE debería acordar las sanciones por contaminación que aplica a cada Gobierno y este, a su vez, las trasladará a las Administraciones competentes. En España una previsible multa recaería sobre las comunidades autónomas.
Fuente: Elpais.com
Por: Ferran Balsells
Publicada: 23 de febrero de 2012.
