Evitar que un niño entre a internet es una tarea complicada, sin embargo, es importante supervisar qué contenido revisan puesto que se encuentran a un solo clic de encontrar gran cantidad de contenido que no es seguro para ellos.
A pesar de que Google tiene una función de búsqueda segura, todavía queda mucho por hacer, es por ello que se ha creado un buscador inteligente, llamado Kidy.
Kidy, está orientando a los más pequeños y quiere enfatizar sitios para aprender, jugar y pensar. Este buscador bloquea palabras clave para adultos, y todo el contenido no apto para menores, además, sugiere páginas educativas.
Además, Kidy tiene un sistema basado en el framework de inteligencia artificial de Google, es decir, que aprenderá de las búsquedas que los niños hacen para mejorar.
El buscador para niños Kidy tiene dos objetivos principales:
- Eliminar el contenido dañino
- Hacer énfasis en páginas para niños donde estudiar y entretenerse.
Para ello aplican varias capas de filtrado:
- Usan el filtro de búsqueda segura de Google que elimina las páginas con pornografía y violencia extrema.
- Los resultados de alta prioridad son seleccionados a mano por los editores de Kidy y le dan más peso a los sitios web orientados a niños.
Kidy es un buscador que bloquea palabras clave para adultos, y todo el contenido no apto para menores.
Después de que una búsqueda pasa por el filtro de Google, el sistema de Kidy identifica contenido explícito y aplica pasos adicionales para ofrecer resultados que son propios para los niños.
Por si fuera poco, Kidy tiene respuestas automáticas a algunas preguntas, y consejos, como cuando un niño busca «drogas». Cabe mencionar que los resultados tienden a repetir bastante las mismas fuentes, pero es una mejor alternativa que dejar que un niño use Google sin restricciones.
De acuerdo con un estudio de la organización civil Guardianes, donde entrevistó a 200 jóvenes de entre 14 y 17 años de varios estados de la República Mexicana, se destacó que 6 de cada 10 menores a los que se entrevistó (58%), dijeron realizar actividades en la red que implican un riesgo.
En el estudio también se destaca que el 84% del contenido que los menores de edad en las redes es información personal que puede poner en riesgo datos importantes, como su ubicación o su domicilio.
Rosario Alfaro dijo en entrevista con Animal Político que 2 de cada 10 menores de edad han participado por iniciativa propia en sexting; una práctica que consiste en el envío de mensajes eróticos o pornográficos por medio de los teléfonos móviles y que ya ha generado graves consecuencias en adolescentes, llegado en casos extremos hasta el suicidio.
Es por ello que es tan importante que los padres estén al pendiente del contenido que revisan los niños, así como analizar qué es lo que están buscando en la red. Pero también es necesario educarlos para que por ellos mismos sepan qué se pueden encontrar en la red y cómo evitar contenido no apto para ellos.
¡Cuéntanos en los comentarios, qué medidas tomas para que tus hijos o sobrinos eviten páginas que no son aptas para ellos y si utilizas algún navegador en especial!
