En un acto de Responsabilidad Social (RS), el actual gobierno del estado de California en EE.UU. busca compensar a 600 personas esterilizadas hace décadas, a quienes les practicó este proceso por considerarlas no aptas para tener hijos. La mayoría de las víctimas del llamado movimiento eugenésico —que alcanzó su punto máximo en la década de 1930— fueron intervenidas contra su voluntad o sin su conocimiento, de acuerdo con The Guardian.
La esterilización forzada en California comenzó en 1909, siguiendo leyes similares en Indiana y Washington. Fue, con mucho, el programa más grande, representando alrededor de un tercio de todas las personas esterilizadas en el país, bajo esas leyes. Familiares de las víctimas y algunas autoridades reconocen que si bien el pago no resuelve el problema, es una forma en que las autoridades están enfrentando su actuar.
EE.UU. busca resarcir el daño a personas esterilizadas
De acuerdo con AP News, la ley de California que instaba a la esterilización fue tan prominente que inspiró prácticas similares en la Alemania nazi, según Paul Lombardo, profesor de Derecho en la Universidad Estatal de Georgia y experto en el movimiento eugenésico.
Como lo comenta el especialista, que se efectuaran este tipo de acciones era un mensaje tácito de poder: «Podrían acabar con todas las instituciones estatales: prisiones, hospitales, asilos, orfanatos […] Las personas que estaban en ellas simplemente no nacerían después de un tiempo si esterilizabas a todos sus padres».
Aunque, California esterilizó a más de 20 mil personas antes de que se derogara su ley en 1979, se ha registrado que solo cerca 600 aún están vivas, y ahora el estado está tratando de encontrarlos para poder pagarles al menos $15,000 a cada una como reparación del daño.
Dos grupos de ciudadanos son elegibles para la compensación: los esterilizados por el gobierno durante el llamado movimiento eugenésico y un grupo más pequeño que fue victimizado mientras estaban en prisiones estatales hace una década.
California impulsa Responsabilidad Social
En 2021, California fue el tercer estado en aprobar una iniciativa de reparaciones por esterilizaciones forzadas —uniéndose a Carolina del Norte y Virginia— y fue el primero en incluir a víctimas más recientes de su sistema penitenciario estatal.
California ha aprobado los pagos de solo 51 personas, de 310 solicitudes, sin embargo, queda un año antes de que cierre el programa de $4.5 millones y los desafíos siguen siendo elevados. Los funcionarios estatales negaron a 103 personas, cerraron tres solicitudes incompletas y están procesando otras 153, pero dicen que es difícil verificar los datos ya que muchos registros se han perdido o destruido.
En este sentido, Lorena García Zermeño, coordinadora de políticas y comunicaciones del grupo de defensa California Latinas for Reproductive Justice, asegura que se debe afrontar y enfrentar la historia y sentencia que “esto no es algo que simplemente sucedió en el pasado”.
De las personas aprobadas para la reparación económica hasta ahora, solo tres fueron esterilizadas durante la era de la eugenesia. Con víctimas sobrevivientes de ese momento en sus 80, 90 y más años, se han enviado carteles y hojas informativas a mil hogares de ancianos especializados y 500 bibliotecas en todo el estado con la esperanza de llegar a más de ellas.
“No sé si es justicia. El dinero no paga lo que les pasó. Pero es bueno saber que esto está siendo reconocido”.
Stacy Cordova, familiar de una de las víctimas.
Una prórroga para las víctimas
Lynda Gledhill, funcionaria ejecutiva de la Junta de Compensación de Víctimas de California, que supervisa el programa, señaló que se está tratando de encontrar toda la información posible para dar con más de las personas afectadas. Pero simplemente a veces no es posible verificar lo que sucedió.
Una de las víctimas, Moonlight Pulido, cumplía cadena perpetua por intento de asesinato cuando un médico de la prisión le dijo en 2005 que necesitaba que le extirparan tumores que podrían ser cáncer. Ella firmó un formulario y se sometió a una cirugía, pero luego notó que algo no se sentía bien y una enfermera le dijo que le hicieron una histerectomía completa donde le extirparon el útero y el cuello uterino.
Pulido se sorprendió. Tenía 41 años en ese momento, ya tenía hijos y expresó que el médico le quitó el derecho de formar otra familia, algo que la afectó profundamente. Cuando fue puesta en libertad condicional en enero de 2022, se puso a colaborar con el grupo de defensa Coalition for Women Prisoners, solicitó la compensación y se le aprobó el pago de $15,000.
Aunque el caso de Pulido fue exitoso, con el cierre en 2023 de este programa, otras víctimas no podrían accesar a la compensación, por lo que Wendy Carrillo, miembro demócrata de la asamblea de California —que presionó para que se aprobara la reparación—, está luchando para que los legisladores extiendan el plazo de solicitud más allá de 2023.
Lo anterior con la intención de dar a las personas esterilizadas más tiempo para presentar la solicitud y ampliar el programa para incluir víctimas que fueron esterilizadas en hospitales financiados por el condado. Y es que cabe resaltar que la junta de supervisores de este se disculpó en 2018 después de que más de 200 mujeres fueran esterilizadas en el centro médico de Los Ángeles-USC entre 1968 y 1974.