Cuando pensamos en hogares ecológicos, solemos imaginar altos estándares de tecnología sustentable que ya han sido implementados en algunos lugares del mundo.
Pero ojo, no es necesario partir de forma tan ambiciosa. Si tienes la disposición, eventualmente puedes ir adaptando tu casa para que sea más amigable con el medio ambiente, pero también es posible hacer pequeños cambios.
Por ejemplo, si usas un sistema de calefacción, elige uno que sea automático. Al regular la temperatura de forma autónoma mediante una programación, ahorras energía y no desperdicias dinero.
Puede que ese sistema sea un poco más costoso que los regulares, pero a largo plazo, es bastante más factible para tu bolsillo y el medio ambiente.
Otra cosa que puedes hacer, es usar fuentes alternativas de energía. Por ejemplo, paneles solares. Es una inversión, pero si quieres lograr una casa sustentable, estos paneles entregan energía limpia que proviene de la fuente más potente: el sol.
Tu casa también puede ser literalmente verde. Una de las premisas de las construcciones sustentables es incluir plantas como parte de la fachada. Así evitas usar revestimientos con pinturas que pueden ser tóxicas, aportas aire más limpio y tienes un espacio más agradable a la vista.
Si estás buscando un nuevo hogar y quieres que sea hecho con materiales más ecológicos, las casas pre fabricadas desmontables son una alternativa conveniente.
Además de poder intervenir en los materiales, puedes hacer diseños personalizados y evitar que se use compuestos orgánicos volátiles, ya que son bastante tóxicos.
Fuente: VeoVerde