Cd. de México ¿De verdad somos una urbe verde?

Hace unos días se nombró a la Ciudad de México como la urbe más verde. Sí, seguro es que muchos pensarán que esto es una ironía… echémosle un ojo.

En el marco de la Cumbre Climática Mundial de Alcaldes (CCLIMA), el D.F. fue la ciudad con el mejor promedio en el desempeño de ocho categorías evaluadas por la Economist Intelligence Unit, así como por la empresa alemana Siemens. Las ocho categorías fueron: suministro de energía y CO2, transporte, uso de suelo y edificios, agua, saneamiento, residuos, calidad del aire y gobierno o gestión ambiental.

Por supuesto que no es un lugar en un concurso global, sino simplemente entre 17 ciudades del A.L. y el sitio lo comparte con la brasileña de Río de Janeiro. En otras palabras, el DF puede ser considerada como “la ciudad más verde” de América Latina. Entre las 16 ciudades restantes están Belo Horizonte, Bogotá, Buenos Aires, Brasilia, Guadalajara, Lima, Monterrey, Montevideo, Porto Alegre, Puebla y Quito. El Índice Verde es el primero que se aplica en la región latinoamericana y forma parte del Índice de Ciudades Ecológicas.

Claro que nos gustaría ver cómo nos va, no con Latinoamérica, sino con los gigantes europeos, norteamericanos, algunos asiáticos o las ciudades canadienses, quienes son los que sientan precedente… porque estar por encima de Montevideo, Buenos Aires, Puebla o Quito está bien, pero qué referencia tenemos con Vancouver (Canada), Malmo (Suecia), Curitiba (Brasil), Portland (USA) and Reykjavik (Islandia) o Freiburg (Alemania), los verdaderos colosos, las verdaderas ciudades verdes.

En este contexto IBM ha puesto en marcha el Desafío de Ciudades Inteligentes, cuyo objetivo es contribuir a que los sistemas y procesos urbanos de al menos 100 ciudades del mundo sean más eficientes y sostenibles.

Con esta iniciativa la compañía donará servicios y tecnología por valor de alrededor de 50 millones de dólares a lo largo de los próximos tres años, con lo que los ayuntamientos seleccionados podrán mejorar la gestión de sus infraestructuras críticas.

La multinacional norteamericana entiende que en este capítulo figuran el transporte, agua, energía o telecomunicaciones, según informó la compañía.

El plazo para enviar las solicitudes finaliza el próximo 31 de diciembre y éstas se revisarán a lo largo de enero de 2011. A partir de entonces, las ciudades o municipios con más posibilidades serán contactadas para proporcionar más información y/o concertar reuniones que ayuden en el proceso final de revisión y selección de candidaturas.

Las ciudades que resulten seleccionadas recibirán una donación de tecnología y/o servicios de IBM valorada entre 250.000 y 400.000 dólares con el fin de tratar un problema específico.

Honestamente, queremos ver allí a la Ciudad de México, y queremos ver, más allá de lo de IBM, que se implemente tecnología de punta para mejorar la ciudad. Queremos ver más allá de las ecobicis o los parabuses; queremos una ciudad donde la calidad del aire no represente un riesgo para la salud, donde el gobierno no de prioridad a los manifestantes sobre el derecho de tránsito, provocando tráfico y por ende mayores emisiones, queremos ver que los camiones del GDF no echen humo como chimeneas, que las ciclopistas sean verdaderas rutas adaptadas para las bicicletas y no simplemente rayas pintadas sobre el pavimento, queremos ver páneles solares, queremos ver energía eólica y un manejo eficiente de recursos hídricos, en fin… queremos ver una ciudad más verde… aunque veamos menos premios.

Sólo una reflexión desde la verdísima Ciudad de México.