El principal motivo del cierre de la Torre Eiffel se debió a una protesta por el nuevo sistema de operación en los tickets ya que dicen que existe una mala gestión de la venta anticipada, lo cual genera «colas monstruosas».
Dicha movilización se retrasó tras el fracaso de las negociaciones de varios días que se han producido entre los trabajadores y la sociedad de explotación de la Torre Eiffel (SETE), la empresa que gestiona la Torre Eiffel.
La Torre Eiffel ha cerrado sus puertas por mala gestión de venta; turistas están enojados.
Hasta hoy, tras dos días de estar cerrada, la Torre Eiffel reabrió su puertas y se espera que haya una mayor organización dentro de sus ventas de boletos.
Con su suspensión, no se supo cuántos turistas se quedaron sin poder entrar a la torre, lo que sí se sabe es que normalmente en el mes de agosto la Torre Eiffel es visitada por al menos 25 mil personas diariamente, lo que quiere decir que en dos días, aproximadamente 50 mil personas no pudieron ingresar, a pesar de tener su boleto pagado.
Antes de volver a abrir sus puertas, SETE le dijo a un medio llamado Le Parisien, que el tiempo de espera es «muy bajo» e incluso señaló que han contratado a 30 nuevos empleados para que los tiempos de espera para los visitantes que compren entradas en el propio monumento sean los mismos que el año pasado, a pesar de que ha aumentado su número.
Sin embargo, esta no es la primera vez que la Torre Eiffel cierra debido a protestas entre los trabajadores y la administración. Anteriormente, en 2015, el considerado uno de los lugares más visitados en el mundo, se puso bajo protesta debido al aumento de carteristas en la zona.
Visitantes no pudieron entrar a Torre Eiffel
Viajar a Francia sin visitar París y mucho menos subir a la torre Eiffel es como no visitar dicho país.
Por ello, cientos de turistas han exclamado tanto en redes sociales como en diferentes medios que se trata de una medida que les afecta hasta en el sector turismo.
Adéle Liliane, una visitante dijo que «estoy muy triste porque venimos desde Canadá. Nos levantamos a las seis de la mañana para conocer la Torre Eiffel. Llegamos entre los primeros, pero está cerrada».
«Claro que quiero subir. Es la Torre Eiffel, cuando vienes a París quieres ver la Torre Eiffel», dijo a Robin Frye, un turista inglés. Es frustrante. Francamente arruina todo nuestro viaje.
«Llevo 28 años esperando venir y hoy está cerrada», se lamentaba el miércoles María, una venezolana, que no dio su apellido. «No me parece justo para los turistas que venimos desde tan lejos».
«Es una pena llegar a este punto, penalizar a la gente, pero hicimos todo lo posible para evitarlo», dijo Denis Vavassori, representante de la CGT.
Por su parte, en un comunicado SETE dijo que «es consciente de la decepción de los visitantes debido al cierre del monumento y en su impacto en la imagen tanto de la ciudad como del país».
«Estamos haciendo todo lo posible para retomar las visitas lo antes posible».
Con la reapertura, se vio que la empresa sí tomó acción de inmediato para no truncar el turismo y sobre todo la reputación de este monumento.
