La empresa aún espera nueva revisión al caso
La Primera Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) desechó un proyecto de sentencia que proponía amparar a Coca-Cola Company en contra de una resolución que emitió la Comisión Federal de Competencia (CFC), con base en la cual multó a la refresquera con 10.5 millones de pesos por incurrir en prácticas monopólicas.
Con este fallo, Coca-Cola perdió una batalla en el litigio llamado “La Guerra de Colas” que lleva 10 años. Aunque tiene la esperanza de obtener la protección de la justicia federal, pues el juicio sigue en curso.
Por cuatro votos contra uno, la mayoría de ministros acordó desechar un proyecto que presentó su compañera Olga Sánchez Cordero, en el que proponía amparar a Coca-Cola y dejar sin efecto la resolución de la CFC, a raíz de la cual se tomaron medidas para evitar que esta compañía refresquera le exigiera a las tiendas del país que sólo vendieran su producto y no ofertaran otro tipo de bebida carbonatada.
La CFC sancionó a Coca-Cola a raíz de una denuncia que promovió su contrincante PepsiCo, en la que la acusó de incurrir en prácticas monopólicas, que, a la postre, fueron confirmadas por el órgano encargado de combatir los monopolios en el país.
Con su decisión la CFC buscó establecer las bases para las refresqueras no puedan exigirles exclusividad a las tiendas, a fin de que los consumidores puedan encontrar variedad de productos en un solo establecimiento.
La decisión de la Comisión fue impugnada por Coca-Cola mediante un juicio de amparo, que después de pasar por una primera y segunda instancia, fue atraído por el máximo tribunal de justicia del país desde el pasado 18 de febrero de 2009, por considerar que era un asunto de relevancia y trascendencia nacional.
En la Corte el asunto se le turnó a la ministra Olga Sánchez Cordero, quien no logró que su propuesta de amparar a la empresa refresquera prosperara.
Ahora que el proyecto de Sánchez Cordero se desechó, el caso se le turnará a un nuevo ministro para que elabore otro, en el cual se puede proponer otra vez amparar a Coca-Cola, aunque por argumentos distintos a los que usó la ministra, o negar la protección de la justicia federal y ratificar la decisión de la CFC.
Salvo el ministro José Ramón Cossío, los otros tres ministros no expusieron en público los motivos que los llevaron a desechar el proyecto de Sánchez Cordero.
Cossío consideró que algunos de los argumentos de la Comisión Federal de Competencia, que pide negarle el amparo a la refresquera, “podrían ser fundados”. Pero para que se elabore el proyecto y se dicte sentencia no existe un plazo establecido.
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