De aprobarse en definitiva el impuesto de un peso por litro a las bebidas saborizadas con azúcares añadidas, dos compañías refresqueras se pondrán petites con sus refrescos y promoverán el consumo de bebidas bajas en calorías.
Las dos principales franquicias de Coca-Cola en México, así como la peruana Big Cola, informaron que subirán sus precios entre 12 y 15% y reducirán el tamaño de sus presentaciones.
Las dos principales franquicias de Coca-Cola en México, así como la peruana Big Cola, informaron que subirán sus precios entre 12 y 15% y reducirán el tamaño de sus presentaciones.
Además, las compañías buscarán incrementar la venta de bebidas dietéticas que no causen ese impuesto.
La madrugada de hoy 29 de octubre, las comisiones unidas de Hacienda y Crédito Público, y de Estudios Legislativos, Segunda, del Senado de la República aprobaron en lo general el dictamen del paquete fiscal de la reforma hacendaria.
En el caso del IEPS, se establece una cuota específica de un peso por litro a las bebidas saborizadas con azúcares añadidas y un gravamen del 5% a la comida “chatarra”.
La semana pasada, Grupo Bimbo dio a conocer que analiza cambiar las recetas a algunos de sus productos para reducir sus calorías, de esta forma, evitaría el impuesto a alimentos chatarra que propone la reforma fiscal, según dio a conocer Daniel Servitje, director general de la compañía.
Grupo Bimbo concentra a las marcas Marinela, Ricolino, Barcel y Tía Rosa.
Aquí puedes ver el contenido calórico del promedio de las bebidas azucaradas:
Fuente: Animal Político.
