El fabricante de software deberá responder del 3 al 5 de junio a la acusación de monopolio; Lo culpan
de poner trabas a competidores, al vincular su navegador con su sistema operativo Windows.
La Comisión Europea ha fijado para el mes que viene una vista para que el fabricante estadounidense
de software Microsoft responda a la acusación de que ha intentado poner trabas a sus competidores,
al vincular su navegador de Internet con su sistema operativo Windows.
La sesión a puerta cerrada se realizará del 3 al 5 de junio, dijo Jonathan Todd, portavoz de la Comisión Europea, el brazo ejecutivo de la Unión Europea (UE).
«Será una oportunidad para que Microsoft exprese verbalmente los argumentos que esbozaron en su respuesta a la declaración de objeciones», añadió.
El gigante del software respondió a los cargos de monopolio de la UE, la llamada «declaración de objeciones,» el pasado 28 de abril.
El 15 de enero, Bruselas acusó a la empresa de infringir las leyes europeas al abusar de su posición de dominio.
Según la Comisión, al integrar su programa Internet Explorer con Windows, Microsoft protegió su navegador de la competencia con productos rivales, perjudicando la innovación y reduciendo la capacidad de decisión de los clientes.
La cuota de mercado de Internet Explorer el pasado febrero era de 67.4%, seguida del Firefox de la Fundación Mozilla con un 22%, según la empresa de estudios de mercado Net Applications.
Microsoft ha dicho ha dicho que la Comisión podría ordenarle a ella y a otros fabricantes de equipamiento que obliguen a los usuarios a elegir qué navegador quieren cuando compren un ordenador, o que haya varios navegadores disponibles en los ordenadores nuevos que lleven Windows. También podría sufrir una fuerte multa.
La empresa ya recibió una multa de 899 millones de euros en febrero por usar altos precios para entorpecer a sus rivales y por no cumplir una decisión antimonopolio anterior de la Comisión.
