El mes de diciembre está a la vuelta de la esquina y muchos ya saben lo que eso significa: regalos, fiestas, ropa nueva, comida… nuestros gastos parecen triplicarse. Las ofertas de fin de año son los eventos más esperados e incluso hay personas que se forman días antes para ser los primeros en entrar. Aunque sepamos que a veces no podemos costear estas compras, lo hacemos pensando que es normal derrochar el dinero a fin de año, y eso no es nada responsable con nuestras finanzas.
Si le pedimos a las empresas que sean moderadas con su uso de recursos, ¿por qué seguimos cayendo en el consumismo desmesurado? Esto no solo afecta nuestros bolsillos, también contribuye a la generación de basura y continuamos aferrados a la mala costumbre de tomar, usar y desechar. ¿Qué pasaría si dejáramos de comprar por unas semanas o un año? ¿Crees que nadie aguantaría 12 meses sin gastar dinero? Michelle McGagh, periodista de finanzas, aceptó el desafío y TreeHugger nos cuenta su historia.
El 26 de noviembre del 2015, McGagh escribió en The Guardian acerca de su resolución de no comprar nada, puesto que se dio cuenta que había gastado aproximadamente 9 mil pesos (400 libras) solo en café en el transcurso del año. Inspirándose en el movimiento Buy Nothing Day –una respuesta en contra del Black Friday–, la periodista declaró que estaba preparada para renunciar a muchos lujos en el 2016: no ir al cine, no comprar ropa, no salir a bares, nada de vacaciones, ninguna salida a algún concierto, ni siquiera tomar taxi o autobús; por supuesto, otra regla era jamás pedir prestado o aceptar que alguien más pagara por ella. Únicamente usaría su dinero para pagar cuentas, los seguros médicos y tener la comida necesaria en su casa.
Se supone que nuestros gastos impulsarán la recuperación del Reino Unido (…) No podemos dejar de comprar, si lo hiciéramos, los negocios quebrarían (…) pero eso no significa que no debamos cuestionar en qué estamos empleando nuestro dinero –Michelle McGagh
Durante el curso de esta aventura, ella continuó escribiendo en The Guardian acerca de su progreso y relató lo difíciles que fueron los seis primeros meses. En una entrevista en The Financial Wellbeing Podcast, McGagh comentó que el inicio fue complicado porque intentaba vivir igual que antes, en lugar de intentar cosas nuevas y descubrir que sí es posible tener una vida plena –social y económicamente– con un presupuesto muy limitado. Además, la experiencia también le sirvió para fortalecer amistades y conocer nuevas personas.
En la misma entrevista, confesó que el no comprar la ha ayudado a mejorado su bienestar y calidad de vida y, a tan solo unos días de terminar su reto, está terminando de dar los últimos ajustes a su libro The No Spend Year, que saldrá a la venta a través de Amazon UK el 12 de enero del 2017.
No tenemos que pasar un año completo sin gastar un solo peso, pero tomar conciencia de nuestras compras nos puede llevar a vivir de una manera más sencilla y plena, sin alarmarnos cuando nos llega el estado bancario y sin esperar la quincena preocupados porque usamos todo el pago para saldar cuentas. El ejemplo de Michelle McGagh es uno que todos deberíamos seguir, ¿quién está dispuesto a aceptar el reto?