Existen muchas ciudades en el mundo que se caracterizan por sus bellos monumentos, paisajes y transitadas avenidas, aunque suelen ser lugares turísticos o de gran importancia, estos lugares muchas veces carecen de medios de transporte adecuados y es por ello que los residentes prefieren utilizar más el automóvil.
Aunque suene difícil de creer, en algunos lugares de EE.UU. el 76% de las personas prefieren viajar en automóvil, que en algún medio de transporte alternativo. Por ejemplo, Seattle es conocida por su fuerte red de autobuses y compromisos ambientales, sin embargo casi el 30% de las personas conduce para ir al trabajo. Por otro lado, en Oklahoma City, solo el 2.2% de las personas no utilizan el automóvil, cifras alarmantes para el medio ambiente, ¿no crees?
Además de ser una amenaza para el medio ambiente, la contaminación de los vehículos es uno de los principales factores del cambio climático. Ese fue el punto de vista del planificador urbano Jeff Speck cuando escribió el libro Walkable City en 2012. La idea de este libro, no era estrictamente escribir los problemas de la dependencia del automóvil o los beneficios de caminar; más bien, se ha convertido en un libro para que las ciudades funcionen bien para las personas que las habitan.
¿Quién se compromete con la movilidad?
En la última década, los diseñadores urbanos y los planificadores del transporte han comenzado a pensar de manera más ingeniosa sobre cómo aumentar la accesibilidad en las ciudades. Speck, en su largo trabajo, ha tratado de explicar por qué deberían hacerlo. Pero se dio cuenta de que solo convencer a los expertos en crear ciudades más transitables y habitables dejaron de lado algunas voces importantes.
El autor de este libro dio una entrevista al portal Fast Company, en la cual aseguró que la planificación de las ciudades siempre ha tenido un impacto en la vida de las personas; ahora, en medida que la tecnología ha surgido para hacer que todo sea más accesible y receptivo, las personas se sienten más conectadas con los sistemas a su alrededor y más capaces de influir en ellos. Además, las personas más jóvenes, especialmente los millennials, son los que están preocupándose por la vida en las ciudades y en la calidad de vida que se puede tener en ellas.
Según el portal Livability, alrededor del 64% de los jóvenes que se mudan, eligen una ciudad por su habitabilidad antes que cualquier otra cosa, y entonces buscan un trabajo. Como resultado, dice Speck, sienten una sensación de pertenencia sobre el lugar donde eligen vivir, y la necesidad de involucrarse en mejorarlo.
101 maneras para crear una ciudad más sostenible
Este libro es una guía para hacer cambios en las ciudades y las personas que habitan en ellas, ya que en estos lugares necesitan una transformación para iniciar una era de vida urbana renovada.
Las 101 reglas son prácticas, atractivas, las cuales fueron redactadas e ilustradas para mayor claridad y repletas de especificaciones y datos. Para facilitar su uso, las reglas se agrupan en 19 capítulos que abarcan todo desde la forma correcta para estacionarte hasta la creación de espacios más cómodos y lugares interesantes para convivir sanamente en las ciudades.
En este libro podrás tomar sugerencias simples para que las personas puedan implementar fácilmente, como construir cruces peatonales excelentes y seguros, usar colores de pintura brillantes de alto contraste para estas.
Además de fomentar el uso de la bicicleta, ya que el experto dice que esto hace de las ciudades más equitativas y transitables.
Speck les recuerda a los lectores que se acerquen a estas conversaciones con los hechos y que las necesidades reales como detener el cambio climático y apoyar la movilidad equitativa, para que impulsen las decisiones de diseño y nuevas políticas, pero recuerda que para crear una ciudad más sostenible se necesita primero el cambio de cada persona.
Si deseas encontrar el libro completo da click aquí.
