La nutrición es el proceso biológico que se genera en nuestro organismo al ingenir alimentos, cuando esto sucede el cuerpo absorbe los nutrientes necesarios para el funcionamiento y mantenimiento de las funciones vitales.
Al adquirir buenos hábitos alimenticios como una dieta saludable y combinarlos con ejercicio físico regular, se pueden prevenir enfermedades como diabetes, sobrepeso, cáncer y cardiopatías.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) recopiló algunos datos importantes sobre el porqué las personas deben priorizar el tema, ya que de no ser así, es posible que se presenten consecuencias.
Te contamos un poco más:
- Los buenos hábitos alimenticios comienzan en los primeros años de vida, por ejemplo, la lactancia materna puede prevenir 823 mil muertes de niños y niñas menores de cinco años.
- La nutrición es esencial para evitar la anemia en los adolescentes, otra etapa importante para el crecimiento.
- La mala alimentación aumenta la morbilidad y las muertes prematuras de madres y niños.
- La carencia de vitaminas y minerales sigue siendo frecuente en todo el mundo.
- La desnutrición durante el embarazo puede tener varias consecuencias para la madre y el bebé.
- Al menos unos 41 millones de niños menores de cinco años tienen sobrepeso, por lo que se le debe inculcar hábitos saludables desde pequeños.
- En la actualidad, el mundo se enfrenta a una doble carga de malnutrición que incluye tanto la desnutrición como la alimentación excesiva y el sobrepeso, sobre todo en los países de ingresos medianos y bajos.
- El Objetivo de Desarrollo Sostenible (ODS), número dos: Hambre cero, busca terminar con todas las formas de hambre y desnutrición para 2030 y velar por el acceso de las personas e infantes, a una alimentación suficiente y nutritiva.
- Las personas deben reducir la ingesta calórica procedente de las grasas, cambiar las grasas saturadas por las insaturadas y eliminar los ácidos grasos trans.
- La OMS recomienda aumentar el consumo de frutas, verduras, legumbres, cereales integrales y frutos secos.
Empresas preocupadas por la nutrición de sus colaboradores
Fomentar una buena alimentación en tu empresa puede ser un gran reto, sin embargo muchas empresas han puesto atención en ello y comienzan a incluir entre sus colaboradores prácticas que los incentivan a cambiar su dieta y optar por otras alternativas saludables.
Fundación Gigante, organización que pertenece a Grupo Gigante, invitó recientemente a sus colaboradores al taller del proceso de la soya, impartido por expertos de Orden de Malta México.
El objetivo de este taller fue continuar con el compromiso que tiene Fundación Gigante con la salud de los mexicanos, pero ahora entre sus colaboradores, ya que la salud es uno de los principales ejes rectores de esta organización.
Gracias a este taller, los colaboradores de Grupo Gigante aprendieron a preparar distintos platillos a base de soya, una semilla bondadosa con la que se pueden cocinar distintas opciones de platillos nutritivos.
A continuación te contamos cómo vivieron esta experiencia los colaboradores del grupo.
¿Cómo se vivió este taller?
El taller del proceso de la soya tiene como finalidad brindar a las personas interesadas una alternativa para la ingesta de proteína, ya que la soya es una legumbre que puede sustituir a la carne, el pescado o el pollo, es más saludable y económica.
El taller se divide en dos partes: En la primera fase a los participantes se les brindó información sobre la semilla y la conocieron a fondo para saber la forma en que sus características pueden contribuir de manera económica y nutritiva a sus familias.
Posteriormente los colaboradores del grupo tuvieron la oportunidad de preparar la soya, la hirvieron, molieron y colaron, como resultado surge la okara, que es la pulpa que se obtiene de la soya una vez molida y hervida. Del agua que se utilizó para hervir la soya se obtiene la leche de soya, la cual se puede endulzar con azúcar.
También tuvieron la oportunidad de preparar platillos como ceviche, picadillo, tinga, hamburguesas, agua de horchata, pinole de soya, entre muchos otros. Al finalizar se les entregó un recetario con toda la información para que recurran a él y lo compartan en sus hogares, e incluso repliquen lo aprendido.
Con un kilo de soya (que tiene un costo de $20 aproximadamente), se pueden obtener cinco kilos de carne y 10 litros de leche. Debido a esto la soya es un alimento alternativo para personas en situación vulnerable, ahora los colaboradores de Grupo Gigante saben que tienen una opción alimenticia saludable.
Es un orgullo que Fundación Gigante nos invitara a brindar el Taller del proceso de la soya. Sabemos que es una organización comprometida con la salud de miles de personas, pero también lo refleja entre sus colaboradores”.
Mencionó Geraldine López Rangel, encargada de la dirección de programas asistenciales de la Orden de Malta.
Lo que debes saber de Fundación Gigante y Orden de Malta
Actualmente la población tiene la inquietud de buscar una alimentación más saludable no solo a nivel rural si no en las ciudades, por ello Orden de Malta México se ha involucrado con personas de comunidades rurales, empresas y organizaciones.
El taller de soya es un complemento del programa nutricional Ayúdame a Crecer, el cual ha apoyado Fundación Gigante desde hace varios años, y tiene como objetivo mejorar la calidad de vida de niños y niñas de entre 6 meses y 12 años de edad que se encuentran en estado de desnutrición y en comunidades vulnerables de la Ciudad de México Hidalgo, Puebla, San Luis Potosí, Estado de México, Tlaxcala, Chiapas, Michoacán y Tabasco.
Este programa nutricional comprende una atención personalizada para cada niño, la cual incluye actividades como: revisiones médicas trimestrales y entrega de dietas especiales junto con el otorgamiento de complementos alimenticios (en forma de golosina y hechos a base de alfalfa) que son donados por la Asociación Franco Suiza Mexicana y Belga de Beneficencia, I.A.P.
Con este programa, cerca de 4,000 infantes reciben mensualmente estas nutritivas golosinas gracias a la alianza entre Fundación Gigante y Orden de Malta México.
Aunado a eso, los padres de familia reciben el taller del proceso de la soya, con el objetivo de fomentar la buena alimentación.
Esta práctica integral es un ejemplo del firme compromiso de Fundación Gigante con sus colaboradores y con las comunidades que más lo necesitan, incentivando a mejorar la calidad de vida de más personas.
